Mientras se encontraba en Islandia el fotógrafo Hallgrimur P. Helgason logró tomar una serie de inusuales fotografías .
El fotógrafo de 64 años capturó el magnífico espectáculo de la aurora boreal pero no una común, esta tiene una forma muy especial, muchos la comparan con un ave fenix, el animal mitológico que renace de las cenizas.
En la silueta se puede ver como se alza un ave gigante emprendiendo vuelo con sus poderosas alas extendidas para adentrase en el profundo cielo nocturno.
Fotografiar las auroras boreales no es tarea sencilla para esto Hallgrimur usa una cámara, un trípode y el mismo aconseja que se debe estar lo más lejos posible de la contaminación lumínica de la ciudad.
También comentó que la aurora boreal se tornaba principalmente verde y amarilla, la noche que fotografió el cielo, se pudo apreciar el rojo y azul dentro de ella, esto significa que era una aurora bastante fuerte.
Claramente las auroras boreales son el producto de la interacción de las tormentas solares con el campo electromagnético de la tierra generando este plasma en la atmósfera que nos deja maravillados.