El sábado 30 de noviembre se concretó la Primera Travesía Histórica Sin Neopreno en Posta, para Conmemorar el 40° Aniversario del Tratado de Paz entre Argentina y Chile.
RIO GRANDE.- La misma fue organizado por la Asociación Nadando Argentina, e impulsada por la Cancillería Argentina, con la colaboración de las Armadas de ambos países, el Gobierno de Tierra del Fuego, la Municipalidad de Ushuaia, Prefectura Naval Argentina, y el apoyo del sector privado (empresa Tolkeyen, con su catamarán Yaghan; Grupo Tremun; Hotel Los Cauquenes, con su lancha Akawaia), y del Club Náutico Ushuaia. Fueron 34 los nadadores de ambas nacionalidades, que entramos de 7 minutos o 500 metros concretaron el evento, con una temperatura del agua de 7,6 grados.
La chilena Carola Ortega (de Puerto Natales) fue la primera relevista, desde Puerto Navarino, mientras que la argentina Flavia Oliva (residente en Ushuaia) cerró el último tramo, en Caleta Aspirante –detrás del Aeropuerto Internacional-, a las 14:19, luego de 4:43 de nado en conjunto, sobre 11 kilómetros.
El evento simbolizó la hermandad entre Argentina y Chile, y marcó un precedente (considerado como un Récord Mundial Oficial).
De primera mano
Entre los 35 nadadores estuvo el riograndense Walter Molinari, quien apuntó que “al comienzo hubo un clima bueno (viento del Suroeste, a 2 nudos), a la mitad del canal las condiciones cambiaron, con vientos y corrientes muy fuerte, que nos exigieron un esfuerzo mayor para poder completar el cruce, realmente fue muy desafiante”.
El deportista, de 62 años, quien en agosto compitió en la II Copa Mundial de la Asociación Internacional de Natación de Invierno (IWSA, por su sigla en inglés), en Lago Argentino (Santa Cruz), añadió que “del grupo, solamente 10 habíamos hecho el trámite migratorio, así que fuimos hasta Puerto Navarino, donde comenzó la posta. El resto se unió cuando la embarcación cruzó el límite, e ingresó a aguas argentinas. En mi caso, nadé cerca del final, estaba un poco complicado, había que nadar fuerte. Eso fue entre dos islotes, la corriente estaba muy fuerte”.
Sobre el punto de finalización, “en principio la idea era llegar hasta el muelle de la AFASyN (Asociación Fueguina de Actividades Subacuáticas y Náutica), en la bahía de Ushuaia, pero se decidió llegar hasta una baliza ubicada en uno de los extremos de la pista del Aeropuerto Internacional Malvinas Argentinas”.