Por Guillermo Worman.- Hace pocos días la gobernadora Rosana Bertone reinauguró el emblemático destacamento Puente Justicia. Encontró esa misma desidia con decenas de obras abandonadas en los cuatro puntos de Tierra del Fuego y en estos tres años se ha dedicado incansablemente a revivir inversiones y obras que estaban descartadas.
Hace pocos días la gobernadora Rosana Bertone reinauguró el emblemático destacamento Puente Justicia. Encontró esa misma desidia con decenas de obras abandonadas en los cuatro puntos de Tierra del Fuego y en estos tres años se ha dedicado incansablemente a revivir inversiones y obras que estaban descartadas.
Pero Tierra del Fuego no escapa a los rasgos de la historia. Por ejemplo, si se presta atención, con frecuencia, el pasado y el presente contienen constantes similitudes. Como un juego que se reinventa y se repite. Esto sucede cuando encontramos factores comunes más allá de algunas características propias de cada contexto. Podríamos decir que se trata de una actitud o predisposición similar o paralela frente a situaciones similares.
Ya hace muchos años, el griego Plutarco escribió la serie “Vidas paralelas”, donde incluyó, por lo menos 23 trabajos biográficos de sendas parejas (griegos y romanos), con perfiles comparables en varios aspectos. Cada uno de ellos se involucraron activamente en la vida pública influyendo en algún sentido.
Aquí sucede lo mismo cuando descubrimos pares entre las máximas autoridades políticas fueguinas. Es una observación constante que consiste en realizar el mismo análisis y reaccionar de forma similar ante el mismo o parecido problema a resolver. Siempre teniendo en cuenta que la historia la seguimos escribiendo.
Ernesto Manuel Campos fue designado Gobernador del entonces Territorio Nacional por el presidente Arturo Frondizi; fue un excelente administrador de los recursos públicos y la obtención de fondos como los generados por las regalías petroleras.
Favoreció la educación pública y la salud, la extensión de los servicios de distribución de la electricidad y el alumbrado público. También lo hizo con el gas, acrecentando la cantidad de población beneficiaria en todo el territorio, como de la provisión de combustible mejorando notablemente la conectividad. De la misma forma, las posibilidades del comercio, turismo, etcétera.
También se destacó en cuanto a la provisión de soluciones habitacionales e inversiones hoteleras para diversificar el desenvolvimiento económico y la generación de empleos como la prestación de nuevos servicios del sector privado (transporte de pasajeros, excursiones, etcétera).
Logró mantener la legislación nacional de fomento de la industria mediante la zona franca, consolidando la economía local favoreciendo las oportunidades laborales de los fueguinos.
Como Legislador nacional con su labor parlamentaria contribuyó a la consolidación de Tierra del Fuego y a la calidad de vida de sus habitantes.
Por mandato popular, Rosana Bertone, muchos años después, desde 2015 ha demostrado con su labor gubernamental una coherente política de desarrollo inclusivo y sustentable, la defensa del trabajo genuino, resguardando el ambiente humanizado, construyendo y manteniendo la infraestructura básica y fundamental, estableciendo estándares relevantes en educación, saneamiento, salud, seguridad, promoción de la iniciativa privada, protección de la población más vulnerable, la expansión del turismo, tanto interno como el externo. Y, de igual modo, acompañó en estos años a los emprendedores, productores y comerciantes, los gestores culturales, la defensa de la soberanía, etcétera.
Mucho ya lo había logrado como legisladora nacional (2005-2009/ 2009-2013/ 2013-2015).
A ambos políticos se los puede encuadrar en las férreas convicciones democráticas propendiendo al desarrollo sustentable en todo el territorio; los dos tienen en común la plena dedicación, próximos a la gente, basándose en la gestión eficiente y jerarquizada.
Hay una idea política común entre Campos y Bertone, a pesar de la enorme cantidad de años de diferencia. Y esto habla a las claras de las numerosas oportunidades desperdiciadas, que por muchos años se aplanaron por la priorización de políticas de muy corto plazo.
Para consolidar su accionar político Ernesto Manuel Campos, en el contexto de la legislación vigente de su época, fue sucesivamente tres veces gobernador (1958-1963).
Rosana Bertone se postula para su segundo mandato con el mismo objetivo. Ambos, cada uno en su respectivo momento histórico, pensando en el presente y futuro de Tierra del Fuego.