BARRANQUILLA, COLOMBIA (AFP).– Boca se jugará hoy su continuidad en la Copa Libertadores cuando visite a Junior cuyo objetivo es claro: pasar a octavos de final y sepultar de paso a un histórico del certamen continental.
Al equipo colombiano le basta una victoria para lograr el boleto y firmar una doble hazaña con un sonoro batacazo para el seis veces campeón de la Libertadores, que no superaría la fase de grupos por primera vez desde 1994.
El definitivo duelo del Grupo 8 se disputará a las 17:15 locales (19:15 hora argentina) en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez, de la ciudad caribeña.
Moral dispar
Los tiburones resucitaron en la Libertadores tras un comienzo turbulento que incluyó ajustar una goleada 3-0 en casa ante Palmeiras, un rival que la semana pasada venció 2-0 a los Xeneizes en La Bombonera y los dejó en la cuerda floja.
Con seis puntos, Junior es segundo del grupo que lideran los ya clasificados brasileños (10), seguido por Boca con cinco unidades y cierra el ya eliminado Alianza Lima con uno.
Si los barranquilleros vencen, los argentinos quedan fuera. Si los visitantes triunfan, se mantienen con vida y el cupo se definirá en la última fecha, cuando los rojiblancos visiten a Palmeiras y los bonaerenses reciban a los peruanos. Un empate posterga el futuro de ambos.
Los líderes del torneo argentino jugarán en Barranquilla con una presión extra: en los pasillos de Buenos Aires se rumorea que, en caso de quedar eliminados, su entrenador Guillermo Barros Schelotto dejaría el cargo.
Nómina completa
El elenco cafetero, octavo en la liga colombiana y parcialmente clasificado a los play-offs, no tiene bajas para el encuentro.
El revulsivo Comesaña, que a principios de abril reemplazó en el cargo a Alexis Mendoza, alinearía a los mismos once que el domingo empataron sin goles con Alianza Petrolera en Barranquilla.
La única ausencia -que prácticamente ya se convirtió en costumbre- es la del peruano Alberto Rodríguez, quien se recuperó de una nueva lesión pero no sería convocado por su nivel irregular.
Desde que el colombo-uruguayo asumió el puesto, los Tiburones han disputado cinco encuentros entre liga y Libertadores con un saldo de dos victorias, dos empates y una sola derrota.
Además de números aceptables, Junior ha recuperado de a poco el buen juego perdido durante la comandancia de Mendoza, impulsado en un buen remate de semestre de sus figuras ofensivas, Teófilo Gutiérrez y Yimmi Chará.
Duda en ataque
Los azul y oro son blanco de fuertes críticas en Argentina por su juego irregular en los últimos meses, que se acrecentaron con la caída a principios de marzo frente a su archirrival River en la Supercopa Argentina.
Al golpe anímico y en el corazón, el elenco de Barros Schelotto ha enfrentado cambios en el plantel motivados por lesiones de jugadores clave o en busca del fútbol perdido.
En medio de esa pesquisa, el Mellizo ha encontrado dudas. La principal es quién acompañará a Carlos Tévez y Cristian Pavón en el frente de ataque: el colombiano Edwin Cardona o Ramón Ábila.
En caso de que el cafetero sea el elegido, el Apache jugaría de nueve. Si es Wanchope el elegido, Tévez arrancaría más retrasado.
A favor, los visitantes contarán con el regreso de un hombre considerado su médula espinal: el mediocampista colombiano Wilmar Barrios, quien no juega desde el 15 de abril por un desgarro.