PEKÍN (AFP).- El jamaiquino Usain Bolt agrandó su leyenda ayer al sumar un nuevo título mundial en la prueba de 100 metros en Pekín 2015, derrotando al estadounidense Justin Gatlin, claro dominador de la temporada, que fue plata.
El caribeño de 29 años, en una baja forma alarmante, en la que solo pudo situarse en el sexto puesto del ranking 2015, apareció en las grandes citas y ganó con un 9.79, su mejor marca del año.
Gatlin, que parecía favorito, y que tenía el mejor registro de la temporada (9.74), quedó a una centésima (9.80), mientras que el bronce fue compartido por el estadounidense Trayvon Bromell y el canadiense Andre de Grasse (ambos con 9.92).
Todo indicaba que ayer se avecinaba el fin del ciclo de Usain Bolt ante un Justin Gatlin, al que siempre acompañará la sombra del dopaje tras sus positivos en 2001 y 2006 que lo tuvieron cinco años castigado.
Pero Bolt, más motivado que nunca, pese a que sufrió en semifinales con un mal inicio y una recuperación en los últimos metros, apareció una vez más y se colgó otra medalla.
En esa semifinal, Bolt llegó a mitad de carrera lejos de los primeros y al final pudo ganar con apuros con un tiempo de 9.86.
“Mi objetivo es ser el número uno hasta que me retire. Y por ello me motivo a mí mismo. Era simplemente correr y hacer mi trabajo. Fue una carrera rara”, declaró.
