La Asociación Rural de Tierra del Fuego inauguró su 37 edición en el predio de “La Oveja Negra”, oportunidad en la que reiteró la crítica situación que atraviesa el sector a raíz de la problemática de los perros asilvestrados. Estuvo presente el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luis Miguel Etchevehere.
RIO GRANDE.- Con una notoria merma de público, la Asociación Rural de Tierra del Fuego llevó a cabo una nueva edición de su feria ganadera y comercial en el predio “La Oveja Negra”, ubicado en la Margen Sur de esta ciudad.
En su discurso, la titular de la entidad, Lucila Apollinare, reiteró la crisis que atraviesa el sector rural a raíz de la problemática de los perros asilvestrados. Sobre el tema se refirió también el ministro de Ganadera provincial, Emiliano Olmedo, que representó además al Gobierno ante la ausencia de la gobernadora Rosana Bertone. Por el Municipio, tampoco estuvo presente el intendente Gustavo Melella, en cuya representación asistieron funcionarios de su gabinete.
Por su parte, el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luis Miguel Etchevehere, agradeció la invitación del sector para sumarse a este tradicional evento, señalando que es “es un honor asistir por primera vez a esta Provincia tan linda y en este lugar tan importante y tan querido por todos los argentinos”.
“Una zona, como tantas otras de la Argentina, que soñó y sueña con un país grande que a través de su gente pueda expresar todo su potencial productivo, como es nuestro caso”, remarcó, a la vez que sostuvo que “el presente y el futuro depende exclusivamente de nosotros, que elegimos a quienes nos representan, y que haya funcionarios a la altura de esas responsabilidades”.
Etchevehere se sumó a la preocupación por la problemática de los perros asilvestrados, planteando que se debe trabajar con proyección de futuro “porque imaginándose el futuro se organiza el presente”.
“Si dentro de 50 años queremos estar arrinconados por los perros ya sabemos lo que tenemos que hacer: nada. Si no hacemos nada ya conocemos el resultado”, agregó. “Una Provincia que estaba poblada de ovejas ahora se despobló y a nuestro entender no es bueno porque se resta trabajo, arraigo y agregado de valor”.
Para Etchevehere “sobran los diagnósticos y nos compete a nosotros hacer algo diferente si queremos resultados distintos. Nos tenemos que poner manos a la obra”.
“Trabajemos juntos en una conjunción público y privada, pero todos hagamos que eso sea posible, y que en este caso la ganadería ovina pueda expresar todo su potencial. Independientemente de los buenos deseos, hay una realidad, para bien o para mal los que estamos hoy somos nosotros, porque no va a venir nadie a resolver nuestros problemas”, concluyó.