El canciller Felipe Solá sostuvo que “Chile no puede pretender proyectar su soberanía en ninguno de esos espacios marítimos”.
BUENOS AIRES (NA).- El canciller Felipe Solá expuso ayer ante el Senado sobre la polémica con Chile por los límites del área marítima y adelantó que “no hay otra manera de tomar esto que no sean negociaciones bilaterales o laudos en un tribunal internacional”, mientras que el oficialismo y la oposición acordaron emitir una declaración conjunta de rechazo.
Solá asistió por videoconferencia a la reunión de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara alta junto al secretario de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, Daniel Filmus, para informar la posición del Gobierno ante la decisión de Chile de marcar los límites del área marítima de su territorio en superposición con los de la Argentina.
El canciller sostuvo que “Chile no puede pretender proyectar su soberanía en ninguno de esos espacios marítimos” que incluyó como parte de su territorio a través de dos decretos firmados por el presidente chileno, Sebastián Piñera, debido al Tratado de Paz y Amistad de 1984.
El país trasandino, según precisó el ministro, “tuvo numerosas ocasiones para expresar su desacuerdo en forma a nivel bilateral o multilateral en 36 años” y “en ningún momento desde la celebración del Tratado hasta mayo de 2020 hizo planteo alguno que siquiera se parezca al actual”.
“Lo más grave es que se abstuvieron de emplear el único medio que el derecho internacional reconoce para objetar el límite exterior de una plataforma continental más allá de las 200 millas, que es el Anexo 1 del Reglamento de la Comisión de Límites de la ONU”, señaló el canciller.
Y, en este sentido, agregó: “No hay otra manera de tomar esto que no sean negociaciones bilaterales o laudos, en un tribunal internacional”.
Sobre el final de su intervención, el funcionario nacional se refirió al entredicho que tuvo en los últimos días con una parte de Juntos por el Cambio, que le reclamó al Gobierno abrir un “diálogo” con el país vecino para resolver el tema.
Al respecto, Solá manifestó: “No me digan qué hacer porque ya sabemos que tenemos que negociar o ir a un tribunal internacional, lo que les pido es que digan quién tiene razón, porque si no es como mirar de la tribuna y decir resuelvan muchachos “.
Por su parte, Filmus remarcó que “la medida intentada por Chile pretende apropiarse de una parte de la plataforma continental argentina y una extensa área de fondos marinos y oceánicos que forman parte del patrimonio común de la humanidad”.
“La pretensión chilena no es aceptable por la República Argentina y corresponde resolverla a través del diálogo”, sostuvo el funcionario al releer la posición pública de la Cancillería y agregó: “Todos los proyectos coinciden en estos aspectos, así que gratamente vemos que hay unanimidad de la dirigencia política respecto de la situación”.
Por último, los senadores llegaron a un principio de acuerdo en torno al proyecto de declaración conjunto que presentarán para que sea votado en la próxima sesión del Senado, todavía sin fecha prevista.
Según lo que conversaron en la comisión, la declaración expresará “su más enérgico rechazo a la pretensión del Gobierno de la República de Chile de extender su plataforma continental al este del meridiano 67° 16 0, violando el Tratado de Paz y Amistad celebrado por Argentina y Chile en 1984 y desconociendo la demarcación del límite exterior de la plataforma continental aprobada por la Comisión de Límites de la Plataforma Continental en conformidad con la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derechos del Mar, de acuerdo a la presentación realizada por nuestro país en 2009”.