Un mural ubicado en Marcos Zar 465 confunde a los transeúntes. Quienes caminan distraídos sin fijar demasiado la vista, ven al pasar al artista terminando una pintura. Sin embargo, Fernando Cani Soto, forma parte de la obra de arte.
USHUAIA.- El muralista Rodrigo Crespo terminó ayer un mural en homenaje a su colega Fernando Ariel “Cani” Soto, y a los inmigrantes italianos que llegaron a Ushuaia hace más de 70 años. La obra de arte fue pintada a pedido de ex miembros de la Sociedad Italiana en Marcos Zar 465, en base a un boceto confeccionado por Soto, poco tiempo antes de su muerte.
Rodrigo Crespo, quien durante muchos años pintó junto a Cani muchos de los murales que embellecen los muros de Ushuaia, explicó que la obra terminada ayer, luego de varios días de trabajo interrumpido por las nevadas y el frío intenso, se convirtió en un homenaje doble.
“Personas que pertenecieron a la Sociedad Italiana, habían solicitado a la Municipalidad un mural que retrate a los inmigrantes llegados a Ushuaia en el siglo pasado. La gente de Cultura me indica ese trabajo y me manda un boceto que confeccionó Cani Soto para cumplir con ese propósito. Cani ya lo había pintado en un panel. Es decir que ya estaba hecho”, explicó Rodrigo Crespo a El Sureño.
“Entonces se me ocurrió incorporarlo a la imagen y lo agregué a Cani pintando su propio diseño. No lo hice idéntico porque no copié el color. Pero sí el dibujo está pasado tal cual el diseño de Cani”.
El mural tiene detalles que crean una ilusión óptica permitiendo imaginar la presencia del artista terminando de pintar su obra. Incluso las plantas que forman parte del “piso” del mural, se confunden con las plantas secas que permanecen firmes junto a la pared. “Nosotros trabajábamos mucho tiempo juntos. Por eso copié también su paleta. Traté que se pareciera a los colores que usaba”.
“Cany” Soto fue muralista, tallerista y director de la revista “Fuego de Encuentro y Divulgación” y es autor de una innumerable cantidad de murales de Ushuaia. Falleció el 31 de marzo último aunque su obra permanece viva en cada rincón de la ciudad.
