Lo dijo la concejal Miriam Mora. Se tratará en la Legislatura de Tierra del Fuego el proyecto presentado en abril por la legisladora Miriam Martínez. Además de la adhesión a la ley nacional, se plantean modificaciones para ampliar los derechos de quienes hacen tratamientos médicos con Cannabis.
RIO GRANDE.- La concejal Lali Mora, se refirió al dictamen positivo de la legislatura fueguina, para tratar el proyecto de ley provincial acerca del uso de medicinal del Cannabis.
Especialmente, Mora expresó su orgullo y felicidad por el trabajo realizado por la Asociación Raíces de Fuego, que agrupa a padres de usuarios y usuarios de de Cannabis en terapias de salud.
“Primero que nada muy contentos porque se ha logrado instalar el tema en la provincia si lo toma la legislatura provincial. Logramos que no sea una adhesión, porque si no era simplemente eso, una adhesión”, dijo Lali Mora en declaraciones a FM Del Pueblo.
“Nosotros lo que queremos es preparar un articulado provincial, con el que podríamos avanzar sobre lo que dice la ley nacional; ampliar las patologías para el tratamiento con Cannabis medicinal; que tenemos todos los recursos para tener el cultivo, porque tenemos el INTA el SENASA; las universidades el CADIC; el laboratorio del fin del mundo. Tenemos todo en la provincia como para avanzar”, insistió Mora.
Mora recordó que en todo el país hay varios jueces que
ya dictaminaron a favor de pacientes y familiares que recurren a las terapias
con Cannabis: “Nosotros no somos quienes para mantener en la ilegalidad a muchísimas
familias que recurren hoy a la medicina alternativa del Cannabis medicinal. Hay
una realidad que el único aceite, del único laboratorio al que se le puede
comprar es de Canadá, y produce acostumbramiento”, recalcó la concejal. Y agregó:
“A veces el aceite de Cannabis, y que se vende por ahí no sabemos qué aceite
es. Porque el aceite real, se hace con la planta, con la flor del Cannabis, y
por lo menos se necesitan cuarenta plantas para hacer un gotero de los chiquitos,
para que lo use una persona todos los días durante por lo menos un mes. Hoy, en
la ciudad, tenemos más de doscientas familias, y cada día aparece alguien nuevo,
para preguntarnos donde se consigue el aceite”.
