En las últimas horas de este viernes, se conoció que los responsables de la empresa Carrier llevarían adelante una reunión con la comisión de trabajadores de la UOM. Este acercamiento podría encender una luz de esperanza en los trabajadores que ven cercana la posibilidad de retomar sus puestos laborales.
RIO GRANDE.- Los trabajadores que perdieron sus puestos laborales en la firma Carrier y que se manifiestan en la puerta del establecimiento fabril, podrían regresar a sus puestos laborales el lunes 9 de agosto.
Así lo dieron a conocer Lorenzo Martín, delegado y vocero de los trabajadores. Según indicó, luego de diversos encuentros entre los representantes de la empresa y la Comisión directiva de la Unión Obrera Metalúrgica, finalmente este viernes “desde la empresa se comprometieron con reincorporar a los trabajadores cesanteados”.
En este marco, en la jornada de este sábado, desde la empresa se convocó a los trabajadores que se mantenían con una manifestación permanente en la puerta del establecimiento para comunicarles que, desde el lunes 9 de agosto, deberían reincorporarse en sus puestos laborales.
Al respecto, Martín indicó que los representantes de Carrier discutirán con los representantes de la UOM, los puntos que los trabajadores reclaman con la condición que vuelvan a sus puestos de trabajo y que se les dé continuidad a los contratados que no fueron cesanteados.
Todo indica que el conflicto podría llegar a su fin este lunes si las partes cumplen con las condiciones y, de llegar a un acuerdo con la dirigencia gremial, los trabajadores podrían retomar sus tareas el 9 de agosto.
El conflicto
Cabe recordar que este conflicto comenzó en momentos en que los delegados de los trabajadores de la empresa presentaron un petitorio interno, en el que pidieron pasar a 3 PPD a planta permanente y a otros 30 quienes trabajan desde 2012 con contratos que se renuevan todos los meses.
Ante este petitorio, la empresa decidió dejar a 38 empleados contratados sin sus fuentes laborales sin una causa justificada. Esta situación generó que los trabajadores despedidos se manifiesten en la puerta del establecimiento fabril y que los empleados que continuaron trabajando, lleven adelante paros de media hora cada tres horas.