Desde Santiago de Chile llegó un desmentido de Maya Fernández, la ministra de Defensa de Gabriel Boric: “La información llega por un medio argentino y por tanto hemos estado en conversación con Cancillería para cuando llegue alguna información más oficial”, agregó. “El antecedente que tenemos y que hemos recabado es que no hay ningún aviso chileno, sea militar o civil, en algún sobrevuelo sin autorización por cielo argentino”, añadió.
RÍO GRANDE.- Por su parte, el viernes durante un acto oficial el ministro de Defensa Jorge Taiana contrarrestó la versión de su par chilena, que es la nieta de Salvador Allende y ratificó la información de su ministerio a Infobae. Dijo que “aeronaves provenientes de Chile han cruzado el espacio aéreo argentino sin aviso, sin plan de vuelo y sin autorización”.
Y dijo que los chilenos «en principio no saben y no reconocen qué aviones pueden haber sido, se está trabajando con las cancillerías de ambos países en encontrar la mejor forma de mejorar el control”.
Fuentes consultadas por Clarín afirman que la filtración de esos supuestos cinco vuelos tienen que ver con mostrar la “efectividad” del Radar Primario Argentino (RPA/170) del INVAP que Taiana instaló este año en Río Grande, Tierra del Fuego, y que fuentes castrenses consideran ahora “más útil para controlar lo que sale del oeste”, es decir, desde Chile, que lo que sucede en las Malvinas.
El matutino sostiene que “estas versiones sobre la supuesta filtración del espacio aéreo argentino se conoció en la misma semana que la Fuerza Aérea de Chile recibió dos aeronaves del Reino Unido para alerta temprana, exploración y reconocimiento aeroespacial. Son dos Boeing E-3 D Sentry, que Argentina no podría adquirir mientras rija el embargo británico de armas y equipamiento bélico contra este país, que se arrastra de la guerra de 1982”.
Esto es muy sensillo: con aviones interceptores se reclama a dichas aeronaves que desciendan al aeropuerto para revisar documentación y plan de vuelo. Pero, sin aviones interceptores es bastante difícil…