Héctor Vásquez Chogue vicepresidente de la Corporación Selk´nam Chile y miembro de la Comunidad Covadonga Ona, visitó Río Grande y Ushuaia buscando a una parte de su familia que habría quedado de este lado de la cordillera. “Al igual que la comunidad Rafaela Ishton, estamos trabajando para que podamos ser reconocidos como pueblo vivo”, afirmó
USHUAIA.- El vicepresidente de Corporación Selk’nam Chile y miembro de la comunidad Covadonga Ona, Héctor Vásquez Chogue, se reunió con miembros de la comunidad Rafaela Ishton durante su estadía en Tierra del Fuego, a donde llegó buscando información sobre sus ancestros de este lado de la cordillera. Por estos días, las 200 personas que componen las ocho familias congregadas en la comunidad Covadonga Ona, se encuentran atravesando el camino legal para ser reconocidos como pueblo vivo en su país , tras haber sido considerados extintos.
“Mi madre, de 85 años recuerda que nuestro abuelo Carmelo le contó en su niñez, que tenía hermanos en Porvenir quienes habían estado en Isla Dawson hasta su cierre en 1911. Él siempre le contó a mi madre que al regresar los tres a la Isla Grande, fueron separados. Uno se llamaba Luis y el otro Camilo. Ellos se quedaron del lado argentino, en Río Grande, mientras mi abuelo quedó en Punta Arenas. Mi interés es saber fehacientemente si mis tíos abuelos estuvieron en Río Grande y si tuvieron familia”, contó Héctor a El Sureño durante su visita a Ushuaia.
En esa búsqueda, la Comunidad Rafaela Ishton ha sido de gran colaboración, dada la cantidad de documentación de que dispone y la experiencia de haber realizado el mismo camino de reconocimiento ante el gobierno argentino hace más de 30 años.
Afortunadamente, el viaje no fue en vano. “Por unos datos que ya me dieron como referencia y que yo también manejaba, voy a empezar a hacer un poquito de investigación y poder completarla con datos más duros y documentos, donde pueda encontrar el otro brazo genealógico familiar”.
Vásquez Chogue mantuvo un encuentro en Río Grande con Miguel Pantoja que se encuentra a cargo del Centro Cultural de la Comunidad Rafaela Ishton y con la antropóloga Cecilia Gerrard, entre otros. En Ushuaia también se reunió con la secretaria de Pueblos Originarios de Tierra del Fuego, Vanina Ojeda Maldonado.
“Fue muy grato, emocionante, enriquecedor. Me sentí muy querido. Hubo una disposición muy grande que yo tampoco esperaba. Creí que el encuentro sería más trivial y más sencillo, pero fue todo lo contrario. El trato, el cariño el aporte de querer ayudarme en esta investigación, yo la recibí muy fuerte, tal cual entre hermanos y eso hace que mi viaje a Tierra del Fuego haya sido fructuoso y muy esperanzador, no tan solo para mí. Mi familia es bastante grande, todavía tenemos nuestra madre viva y están todos muy ansiosos de saber cómo me fue”, dijo el referente notoriamente conmovido.
El año pasado, la Corporación Selk’nam Chile presentó todos sus antecedentes ante la Cámara de diputados de Chile y después ocho meses lograron elaborar un proyecto de ley para que fuese visto y tratado en el Congreso. “Lo hicimos para que ellos se convencieran de que la historiografía que decía que nosotros éramos un pueblo extinto en el lado chileno, no era tal, sino que había niños que crecieron y tuvieron familia y nosotros somos los descendientes vivos, que estamos aquí por ellos, trabajando para que a través de la legislación chilena podamos ser reconocidos con todo lo que ello pudiera conllevar”.
“En enero se empezaron a hacer reuniones en el congreso en la ciudad de Valparaíso, a las cuales nos citaban semana a semana para recabar información, datos, testimonios de las personas que habían recopilado relatos orales o documentos para demostrar la veracidad de los datos que ellos tenían. Finalmente, a principios de febrero, la comisión votó en forma unánime por nuestro reconocimiento”.
“Eso nos emocionó profundamente, porque significa que vamos por el camino correcto y esperamos que en marzo, cuando se retome la actividad legislativa en el congreso chileno, podamos estar nuevamente en tablas, para que ahora la cámara de diputados en pleno escuche e trabajo realizado por la comisión y lleguen a la convicción para que se apruebe”.
Un largo camino
Además de toda la documentación que respalda sus raíces selk’nam, los integrantes de la Corporación Selk´nam Chile cuenta con el aval de la Universidad Católica Raúl Silva Henriquez y de la Congregación Salesiana en Santiago, cuyo director se ha ofrecido a ir al congreso nacional para demostrar la veracidad de la documentación presentada y poner a disposición todos sus registros.
“También nos estamos apoyando en la experiencia que ha tenido la comunidad en Río Grande, lo cual nos ha vitalizado mucho. Su experiencia nos da más fuerza para seguir adelante con el proceso de reconocimiento que estamos viviendo en Chile”, apuntó
“Creemos que es de vital importancia el contacto con las comunidades de ambos lados de la cordillera, ya que eso nos ayuda a visibilizar en el congreso chileno que el estado argentino reconoció al pueblo selk’nam como un pueblo vivo y lo tiene incluido en sus leyes y eso debiera servir como ejemplo también para que lo tomen como referencia”.
En marzo, doce integrantes de la comunidad harán un viaje a Tierra del Fuego para realizar encuentros en nuestra tierra en Timaukel y Porvenir con familiares. En Porvenir están muy interesados en este evento, porque según indicó, tenían la convicción de que no había quedado nadie del lado chileno y los que quedaban estaban del lado argentino. “Están tan ansiosos como nosotros de encontrarnos, de reivindicar este proceso y estamos expectantes y con deseo de reencontrarnos en esa oportunidad con la Comunidad Rafaela Ishton”.