RIO GRANDE.- La condena fue impuesta por el Tribunal de Juicio Oral en el caso contra O.M.G. de 40 años, sujeto acusado de haber abusado sexualmente de la hija de una expareja, cuando ocasionalmente ella convivió con ellos.
La condena fue bajo la carátula del delito de “abuso sexual calificado” por acceso carnal, por estar la víctima bajo su guarda, y aprovechar una situación de convivencia preexistente.
La condena responde a hecho ocurridos en agosto del 2013 cuando víctima y victimario convivieron alrededor de un mes, en ocasión que la menor quiso convivir un tiempo con su madre, por ese entonces pareja del condenado.
El fiscal había solicitado 10 años de prisión y el tribunal encabezado por el Dr. Daniel Borrone aplicó la condena en la escala mínima prevista para este tipo de hechos.
El condenado tras la lectura del fallo se retiró de tribunales con su familia, dado que no se pidió su detención en razón del criterio jurídico devenido del fallo “Donamaría”, por el cual las penas de prisión se harán efectivas una vez que queden firmes, y la defensa aún tiene una instancia de casación ante el Superior Tribunal de Justicia.
El condenado fue excarcelado hace algunos meses aunque con pautas de conducta, entre las cuales cuenta con una prohibición para salir de su domicilio.
Fiscal pedirá detención
Ante esta condena con el recluso en libertad, el fiscal Pablo Candela aseguró que realizará una presentación “en los próximos días, porque acá hay una cuestión de que existe un ADN incriminando al imputado y sabemos que el tribunal ya fijó postura respecto del tema de la prisión preventiva para casos sin condena firme, ya que esta condena es pasible de una casación, pero vamos a hacer una presentación a ver si se puede contemplar la detención bajo estas circunstancias excepcionales”, planteó.
