El nuevo acuerdo permitirá fortalecer las autonomías provinciales a través de la modificación de los compromisos asumidos entre el Estado nacional y las jurisdicciones. Se puso un freno a la baja de Ingresos Brutos, lo cual oxigenará las cuentas públicas de los gobernadores.
BUENOS AIRES.- El presidente Alberto Fernández recibió ayer en Casa Rosada a los gobernadores de 22 provincias y al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a quienes convocó a celebrar un nuevo acuerdo para el consenso fiscal 2019.
Gustavo Melella de Tierra del Fuego no pudo estar presente debido a que en la misma jornada del encuentro se aprestaba a jurar frente al Poder Ejecutivo; sin embargo, prestó su acuerdo para firmarlo más adelante, de manera personal.
En la reunión, el Presidente firmó la suspensión del Pacto Fiscal vigente para fortalecer las autonomías provinciales a través de la modificación de los compromisos asumidos entre el Estado nacional y las jurisdicciones.
Fernández selló con los gobernadores una adenda del consenso fiscal que se firmó en 2017, según la cual se puso un freno a la baja de Ingresos Brutos e impuestos “distorsivos” hasta el 31 de diciembre de 2020. Con esta medida, el Estado prevé un alivio fiscal de 60 mil millones de pesos para las 23 provincias y la Ciudad Autónoma.
Otro de los principales puntos del texto consensuado fue la suspensión, por el término de un año, de los juicios iniciados por las provincias contra el Estado, “absteniéndose de iniciar procesos por idéntica causa aquellas que aún no lo hubieran hecho.
La adenda prevé la creación de una Comisión de Evaluación del Impacto de la reducción del IVA y de Ganancias sobre la canasta básica de alimentos, que tendrá la función de “proponer medidas y cursos de acción que posibiliten una solución integral, de carácter no judicial”.
El acuerdo paraliza la baja que estaba prevista para el año próximo para impuestos como Ingresos Brutos, Sello e Inmobiliario. De esta manera, los mandatarios provinciales esperan “mantener la caja de recursos de las provincias”. Así lo manifestó Sergio Uñac (San Juan), al tiempo que advirtió que la medida no constituye “un cheque en blanco para poder subir los impuestos”.
Los presentes
En una conferencia de prensa posterior, el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, precisó: “Debemos colaborar porque lo más importante es restablecer la economía, y que podamos adoptar medidas concretas que repercutan directamente en favorecer el consumo y el poder adquisitivo del salario”.
A su vez, el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, destacó que el acuerdo firmado con el presidente Fernández y los otros gobernadores “nos da un alivio a las provincias durante un año”.
Señaló que “la suspensión de ese acuerdo de 2017 y parar el cronograma de baja de impuestos nos va a permitir una mayor recaudación”, e informó que el nuevo consenso “nos impacta, en Jujuy, en 1.000 millones de pesos más que vamos a recaudar el año que viene, así que es una ayuda.”
Estuvieron presentes los gobernadores de Buenos Aires, Axel Kicillof; Catamarca, Raúl Jalil; Chaco, Jorge Capitanich; Chubut, Mariano Arcioni; Córdoba, Juan Schiaretti; Corrientes, Gustavo Valdés; Entre Ríos, Gustavo Bordet y Formosa, Gildo Insfrán.
También participaron los mandatarios provinciales de Jujuy, Gerardo Morales; La Pampa, Sergio Ziliotto; La Rioja, Ricardo Quintela; Mendoza, Rodolfo Suárez; Misiones, Oscar Herrera Ahuad; Neuquén, Omar Gutiérrez, y Río Negro, Arabela Carreras.
Los gobernadores de Salta, Gustavo Sáenz; San Juan, Sergio Uñac; San Luis, Alberto Rodríguez Saá; Santa Cruz, Alicia Kirchner; Santa Fe, Omar Perotti; Santiago del Estero, Gerardo Zamora; Tucumán, Juan Manzur; y el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta; estuvieron en el encuentro.