Al cumplirse un nuevo aniversario de la muerte de la pequeña Agustina Varela, su abuela, Blanca Marinoff, convocó a una manifestación para pedir por justicia. La mujer invitó a la comunidad a que la acompañe en su pedido que lleva 15 años de injusticia.
RIO GRANDE.- El jueves 5 de agosto se cumplirá un nuevo aniversario de la muerte de Agustina Varela en el marco de un hecho que conmovió a toda la provincia y que aún no encuentra una condena justa.
Ante este aniversario, su abuela Blanca Marinoff, convocó a los vecinos a que la acompañen en una manifestación que llevará adelante el jueves 5 de agosto a las 15:30 en la plaza de las Américas.
Marinoff, cuando e se cumplirán 15 años desde el momento en que su nieta de 3 años, pagó con su vida el maltrato de su padrastro.
La abuela pidió a la gente de Río Grande “que me acompañe porque lo que le pasó a mi nieta podría pasarle a cualquiera y la Justicia hace oídos sordos y no condena con la firmeza que debería”.
Finalmente, sobre la actualidad de la causa Agustina, la abuela manifestó que la causa fue remitida a Buenos Aires y eso generó que el asesino, sólo cumpla 1 año de los 15 que le dio la justicia en un juicio que se llevó adelante en julio de 2017.
Quienes deben impartir justicia “sólo me dicen que hay que esperar y esperar, pero hasta cuándo hay que esperar”, se preguntó Blanca y se contestó que “parece que debemos esperar hasta que el condenado cumpla su condena libre y la causa quede impune”.
Al recordar las veces que la Justicia dejó libre a Lucas Gómez y que finalmente fue condenado, entendió que “los jueces finalmente lo condenaron porque se dieron cuenta que había muchas falencias en todos los procedimientos que se hicieron. Para subsanar y porque ya no tenían cómo justificar la gran cantidad de errores que cometieron en la investigación es que condenaron a Gómez, pero esa condena fue como una burla porque ahora está libre y parece que estará libre por el resto que le quede de condena”.
Cabe recordar que en el momento en que se lo condenó a Gómez, el Superior Tribunal de Justicia resolvió la causa que llevaba más de ocho años de idas y vueltas. Los jueces hicieron lugar a las apelaciones por el segundo juicio, en el cual también fue absuelto Lucas Gómez por el homicidio de la pequeña de 3 años.
En este marco, los jueces tomaron el juicio y fueron más allá de lo actuado por el tribunal, analizando la prueba producida, y revocando la absolución.
Al hacer todas las pericias finalmente el Superior Tribunal condenó en julio de 2017 a Gómez por homicidio, y solicitó al tribunal del segundo juicio que se constituya para definir el monto de la pena que finalmente fue fijada en quince años.
Juicios tras juicios
En junio de 2014 el Tribunal de Juicio en lo Criminal del Distrito Judicial Norte absolvió por segunda vez, y por el beneficio de la duda, a Lucas Gabriel Gómez, acusado de ser el autor del homicidio de la menor.
Ese fue el segundo juicio oral y público que se desarrolló por el caso luego que el Superior Tribunal de Justicia dictara nula una sentencia anterior y ordenara un nuevo juicio, tras la apelación a la decisión del Tribunal que había absuelto a Lucas Gómez.
Los hechos
Cabe recordar que la muerte de Agustina Varela ocurrió entre las 02:00 y las 03:15 del 5 de agosto de 2006, cuando la familia de Agustina se encontraba reunida en una fiesta familiar para celebrar el cumpleaños una tía de ella.
La niña había sido llevada a la reunión por su madre, Rosalía Varela, y por Gómez, pero la mamá se retiró antes porque tenía que rendir un examen al día siguiente en Ushuaia y dejó a la nena con sus familiares y su pareja.
Según dio por acreditado el fiscal, el imputado acompañó a la chica al baño y regresó después de un rato diciendo que ésta se había quedado durmiendo junto a una primita en una habitación.
Ya al final de la fiesta, otra tía (Viviana) llevó a las dos nenas a su casa y al llegar a la vivienda, Agustina comenzó a quejarse. Ante estas quejas de la pequeña, la mujer la revisó y descubrió que tenía golpes en el abdomen y en un ojo.
Tras dar aviso a su hermana, llevó a la niña al Hospital de Río Grande, donde la asistieron, pero murió cerca de las 07:00 por un shock hemorrágico por politraumatismos varios y desgarro traumático de hígado, según estableció la autopsia.
En los alegatos, el fiscal Candela valoró los peritajes forenses que indican que la niña fue golpeada en la franja horaria en que se encontraba a cargo de Gómez y enumeró a la gran cantidad de testigos que lo vieron con ella cuando la llevó a dormir.
Además, tuvo en cuenta el testimonio de una prima de Agustina que había visto al imputado golpearla en la nuca una semana antes del crimen y escuchó el mismo gemido de dolor de la niña la noche de la fiesta.
Candela dijo que también se logró probar que la nena era sometida a maltratos desde fines de 2005, cuando Gómez inició una relación con la madre y la niña “cambió radicalmente su conducta” por esta situación.