Argentina experimenta un crecimiento constante de la venta online, por lo que comenzó a incrementarse en paralelo la devolución de productos, algo que implica una “logística inversa”.
BUENOS AIRES (NA).- De acuerdo a cifras de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), durante los primeros seis meses del 2024 hubo un crecimiento en la facturación de más del 248% en comparación con la primera mitad de 2023.
Esa suba trajo también un aumento de la logística inversa, definida como el proceso en el cual un producto regresa desde el cliente al proveedor abarcando actividades como devoluciones, reacondicionamiento y reciclaje, ha mostrado un crecimiento notable en los últimos años.
De acuerdo con un informe presentado por la empresa Kings Research, el mercado de la logística inversa ha alcanzado los 533,18 mil millones de dólares en 2023.
Al aumentar las compras en línea, de acuerdo con las cifras de la CACE, también aumentan las devoluciones debido a fallas en las entregas, errores en la dirección o simplemente inconvenientes con el producto, como talla equivocada”, detalló Gabriel García, director de Operaciones de Celsur Logística.
“Los beneficios de la logística inversa son evidentes tanto para las empresas como para los consumidores. Para las empresas, la optimización de estos procesos permite una reducción de costos, la mejora de la satisfacción del cliente y el cumplimiento de normativas ambientales.
A largo plazo se espera que la logística inversa siga desempeñando un rol crucial en la transformación de la cadena de suministro global.
La creciente adopción de modelos de economía circular y la necesidad de cumplir con normativas ambientales más estrictas impulsarán su relevancia en sectores como el comercio minorista, la manufactura y la tecnología.
Además, la innovación en los procesos permitirá una gestión más eficaz de los recursos y una mayor rentabilidad para las empresas.