La obra para Río Grande sigue parada por la demora en el giro de fondos del fideicomiso. El Municipio aportó 35 millones de fondos propios para la reactivación, a la espera de la devolución de ese dinero para avanzar ya que ahora la empresa PROALSA, encargada de la obra, pide una readecuación de los precios debido a la inflación.
RÍO GRANDE.- La obra para Río Grande sigue parada por la demora en el giro de fondos del fideicomiso. El Municipio aportó 35 millones de fondos propios para la reactivación, a la espera de la devolución de ese dinero para avanzar ya que ahora la empresa PROALSA, encargada de la obra, pide una readecuación de los precios debido a la inflación.
La gobernadora Rosana Bertone -consultada sobre el tema- sugirió hacer un traspaso a otra empresa que se haga cargo de los trabajos. “Propusimos la alternativa de que se rescinda ese convenio y se haga uno nuevo porque si vamos a estar todo el tiempo pagando intereses improductivos no vamos a avanzar nunca, una obra judicializada no le conviene a nadie”, dijo.
Pero, además Bertone sostuvo que sería más ágil la gestión “si el contrato lo tuviera la provincia con la empresa”. Y consideró que podría resolverse con “una rescisión voluntaria de la empresa, que tiene el contrato con la Municipalidad, porque lamentablemente no es con la provincia”.
Asimismo dio a conocer gestiones realizadas esta semana Buenos Aires para destrabar 110 millones del Fideicomiso Austral, y de ese total se devolverían los 35 millones a la ciudad de Río Grande.
Bertone sostuvo que “a un ritmo normal de obra, si se normalizaran los pagos, llegaran los certificados en tiempo y forma, y si el Tribunal de Cuentas municipal hiciera todo rápido, si todo fuera súper bien, el plazo restante es de dos años aún”.
El intendente Gustavo Melella salió rápidamente al cruce y descartó de plano traspasar la obra de la planta potabilizadora. “Se va a hacer y la vamos a terminar como corresponde”, indicó y remarcó que “esperemos que esto no sea parte de una campaña política que se viene”.
“Si el gobierno quiere que le dé la obra, que me lo digan; que llamen y me lo digan”, desafió el intendente de Río Grande.
En este orden expresó que “estamos pronto a entregar viviendas, el 7 de julio inauguramos el centro de salud de Margen Sur y no vamos a esperar. Todo esto se va a hacer, que los vecinos de Río Grande se queden tranquilos, porque la planta se va a terminar y nuestro deseo es terminarla cuanto antes”.
“Si están tan interesados en algo, podrían colaborar, agilizando, acelerando el pago, porque el gobierno provincial es parte del Fideicomiso. O que nos paguen la coparticipación y terminamos la obra nosotros”, apuntó.