El ministro de Ciencia, Roberto Salvarezza, participó de una cumbre internacional en la que se refirió a los avances alcanzados como la secuenciación del genoma del virus, el suero equino hiperinmune, el plasma de convaleciente y el desarrollo de textiles con nanotecnología para repeler el virus.
BUENOS AIRES.- El ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación, Roberto Salvarezza, aseguró que “esta pandemia ha puesto de relieve las capacidades de nuestros cerca de 70 mil científicos que trabajan en más de 20 institutos de investigación, cien universidades y varias empresas”.
Salvarezza participó de la cumbre internacional de rango ministerial “Esfuerzos globales en la lucha contra el coronavirus: desde la investigación a la práctica”, organizada por el Estado de Israel.
El Ministro de Ciencia y Tecnología realizó una exposición sobre “investigaciones científicas innovadoras en el campo del coronavirus” y “acciones impulsadas por los gobiernos en la lucha contra el coronavirus – lecciones aprendidas sobre prácticas efectivas y efectos no deseables”.
Salvarezza habló sobre la reunión realizada en el Ministerio de Ciencia en marzo, con los primeros casos de coronavirus en nuestro país, de un grupo interdisciplinario de expertos para debatir sobre esta problemática: “Nuestro objetivo era tratar de identificar las oportunidades que nuestros científicos y el sector privado podrían tener para luchar y mitigar las consecuencias del COVID-19”, expresó el ministro.
“El 18 de marzo creamos la Unidad Coronavirus para coordinar todas las acciones llevadas adelante por distintos grupos de investigación, como el desarrollo de software para aplicaciones móviles, de equipamiento médico, de test de diagnóstico alternativos al tradicional RT-PCR, terapias de anticuerpos policlonales, y el desarrollo de elementos de protección personal”.
A su vez, se refirió a otros avances alcanzados como la secuenciación del genoma del virus, el suero equino hiperinmune, el plasma de convaleciente, el desarrollo de textiles con nanotecnología para repeler el virus, y la próxima producción, junto a Méjico, de la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford.
“Esta pandemia ha puesto de relieve las capacidades de nuestros cerca de 70 mil científicos que trabajan en más de 20 institutos de investigación, cien universidades y varias empresas. Antes de la pandemia, sabíamos que el sistema podía llevar a cabo con éxito proyectos a largo plazo, como los de los sectores nuclear y espacial. Lo que hemos aprendido ahora es que también es capaz de pasar del laboratorio a la producción trabajando bajo una fuerte presión y en un tiempo extremadamente corto. Esta lección invaluable es un hito que nos ayudará a abordar problemas cruciales de nuestra sociedad”, expresó al finalizar Salvarezza.