La denuncia fue realizada ante el INADI por el historiador Miguel Pantoja de la Comunidad indígena Rafaela Ishton y recayó en la institución, luego que uno de sus dirigentes, lo agrediera públicamente a través de las redes sociales.
USHUAIA.- El Colegio Profesional de Trabajo Social de Tierra del Fuego fue denunciado ante el Instituto Nacional contra la Discriminación la Xenofobia y el Racismo (INADI), luego que su presidente, Fernando Velásquez Leiva, en representación de éste, agrediera públicamente a Miguel Pantoja, historiador de la Comunidad Selk´nam Rafaela Ishton, tras un evento que se desarrolló en el marco del aniversario del genocidio de ese pueblo indígena.
Durante el intercambio que se dio en las redes sociales, Pantoja expresó sus inquietudes en forma respetuosa y a cambio, fue cuestionada su voz, su trayectoria pero sobre todo, su capacidad de entender, haciendo especial énfasis en su falta de títulos como si ello lo convirtiera en un ser inferior.
Ayer, Miguel Pantoja hizo pública su denuncia a través de su página de Facebook denominada Shesces, en la cual cuenta historias documentadas sobre su pueblo y analiza con datos e información precisos, el pasado fueguino que la historia oficial nunca cuenta.
“Desde aquí venimos mostrando otra mirada, que los pueblos continuamos presentes y tenemos un lugar importante en el proceso de construcción de conocimiento, sobre todo aquel que se refiere a nosotros. Existen formas de racismo que nos atraviesan, una muy particular que proviene de esa academia o, más bien, de esos académicos que hoy actúan como portavoces de nuestra historia”, escribió Pantoja ayer.
“Hace poco tiempo fui interpelado por un trabajador social, que además dirige un colegio de profesionales. Es desde un supuesto lugar de privilegio que esta persona me trató como un ser inferior e incapaz de comprender sus palabras, cuestionando mi voz y mis experiencias previas, observando que no dispongo de “títulos” para opinar de modo idóneo. Bourdieu le llama a esto el -racismo de la inteligencia-, pues bien, los títulos no son garantía de “inteligencia”. Sin embargo, esa forma de hacer ciencia y de pensarnos “desde afuera” ha marcado una relación histórica en detrimento de nuestros pueblos originarios y hoy sigue vigente”.
“Por estas y otras razones más que, reservé para la denuncia ante el INADI, le pido una vez más, al Colegio Profesional de Trabajo Social de Tierra del Fuego que se retracte, ya que sus dichos se realizaron en su nombre. También sugiero se revea esta situación, para que en un futuro próximo ni un hermano/a más sea tratado/a con desprecio por opinar sobre actividades que nos afectan como pueblos originarios existentes, o se deslegitime nuestra voz por no tener “nivel académico”, concluyó el historiador selk´nam en su publicación.
Precisamente, hace unos días, el doctor en Ciencias Sociales e investigador del Conicet Daniel Mato afirmó en una entrevista publicada por la agencia Telam, que “la sociedad argentina es tan racista que ni siquiera se da cuenta de su racismo” y que la eliminación del racismo en la Argentina “no se logrará de un día para el otro”, aunque “la educación superior puede desempeñar un papel clave” en esa transformación.
Para el académico e investigador del Conicet, es posible evolucionar a una sociedad no racista, pero al ser “constitutivo del Estado argentino y de nuestra sociedad con al menos dos siglos `con nosotros´, no vamos a resolverlo en pocos días”.
“Las universidades y los institutos de educación superior juegan papeles clave en la reproducción y naturalización del racismo en todos los ámbitos sociales y en particular en el resto del sistema educativo”, dijo y puso como ejemplo de discriminación racista la “escasa participación” de indígenas y afrodescendientes entre cuadros docentes, de gestión y estudiantes.