En el Día Internacional Libre de Bolsas Plásticas recomiendan a la gente reutilizar lo máximo posible. La fecha fue instaurada por iniciativa de la Fundación Catalana para la Prevención de Residuos y el Consumo Responsable, para crear conciencia sobre nuestra responsabilidad como consumidores en la contaminación de la tierra y los océanos por plástico.
USHUAIA.- El Día Internacional Libre de Bolsas Plásticas, fue creado con el propósito de que la humanidad tome conciencia acerca de la cantidad de plástico que usamos y la necesidad de reducir el consumo de bolsas de plástico, ya que estas son el símbolo del consumo abusivo y de la cultura de un solo uso. Además, las bolsas de plástico también tienen un elevado impacto ambiental por la gran cantidad de tiempo que tardan en degradarse, aparte del efecto que tienen sobre la fauna y sobre nosotros mismos.
La necesidad de reducir el uso del plástico, está relacionada directamente al daño que este material produce sobre el medio ambiente y nuestra propia vida. Los plásticos no se pueden reciclar en proceso industrial muchas veces, porque pierden calidad y reciclabilidad a medida que se reciclan.
Tampoco son biodegradables. Cuando se desintegran, forman partículas diminutas llamadas microplásticos que quedan flotando en el agua y son ingeridos por la fauna marina. De acuerdo a las últimas investigaciones realizadas sobre la vida en el mar, se ha comprobado que más del 90% de las aves marinas tienen plástico en sus estómagos, al igual que los peces que consumimos.
A causa de este circuito, los seres humanos ingerimos microplásticos diminutos en forma indirecta a través del agua y los alimentos, que equivalen lo que pesa una tarjeta de crédito, por semana.
Por todo ello, esta convocatoria anual se suma a las decenas de acciones de concienciación y reducción de los residuos de plástico que se están poniendo en marcha a escala mundial.
Cada año se vierten en los océanos 8 millones de toneladas de plástico, lo que amenaza la vida marina y humana, y destruye los ecosistemas naturales.
La celebración de este día pretende hacernos conscientes de que nosotros mismos podemos cambiar hábitos en nuestro día a día y así reducir la pesada carga de la contaminación de los plásticos en nuestra naturaleza
Por ello, el Día Internacional Libre de Bolsas critica que las campañas actuales se dirijan sólo al consumo de bolsas fabricadas en polietileno de alta densidad (HDPE), defiende que sustituir unos plásticos por otros “igualmente comportaría el consumo de recursos no renovables”. Lo adecuado es reducir de forma efectiva el consumo de bolsas de un solo uso; optar por un consumo responsable, donde la función principal del envase, sea con sistemas de larga duración o reutilizables y fomentar que se apliquen medidas disuasorias del consumo de bolsas como la incorporación de su coste ambiental.
Asimismo, promueve informar para que la ciudadanía, los municipios, las entidades sociales y el sector comercial apuesten por este cambio cultural y ambiental, y pidan a sus gobiernos, administraciones, sector comercial que apuesten por estas medidas de prevención de la contaminación y de residuos.
Usarla 3, 4 o 131 veces
La Agencia del Medioambiente británica determinó cuántas veces debe usarse una bolsa para que su vida útil haya compensado su producción.
Las bolsas de plástico deberían ser reusadas al menos cuatro veces, las de papel tres, mientras que las de algodón 131 veces.
A esto hay que añadir que el papel es el material menos probable de soportar los tres usos necesarios.
“La clave es reducir el impacto de estas bolsas, sin importar el material y reutilizarlas tanto como sea posible”, señala Margaret Bates, profesora de gestión sostenible de residuos en la Universidad de Northampton.