BUENOS AIRES (NA).- Diputadas opositoras ratificaron ayer que pedirán una sesión especial para el 8 de marzo próximo con el fin de tratar un proyecto de ley sobre despenalización del aborto, pero el oficialismo intentará prolongar el debate en las comisiones.
Luego de que trascendiera que el Gobierno habilitó a sus legisladores a dar el debate sobre la despenalización del aborto, tanto en la oposición como en el oficialismo se preparan para lo que será una de las principales discusiones parlamentarias del año.
Si bien un grupo de diputadas opositoras encabezadas por Victoria Donda (Libres del Sur), Mayra Mendoza (FPV) y Romina del Plá (Frente de Izquierda) ya habían adelantado días atrás que pedirían una sesión especial para debatir el tema en el marco del “Día Internacional de la Mujer”, la noticia que dio el oficialismo fortaleció esa decisión.
Donda adelantó que el proyecto será presentado el 6 de marzo y ratificó que pedirán una sesión especial para el 8 porque, según consideró, “ya están dadas las condiciones para que se discuta en el Congreso” dado que “el debate hoy está muy instalado en la sociedad y en los medios”.
En declaraciones a radio Continental, la diputada señaló que la “sorprendió” la decisión que dejó trascender el Gobierno y agregó: “Este debate se gana en el debate social y después se vota en el Congreso. Primero había que ganarlo en la opinión pública, y ya están dadas las condiciones para que se discuta en el Congreso”.
A su turno, Mayra Mendoza desconfió de las intenciones del oficialismo, al considerar que el Gobierno “quiere tomar el tema y usarlo en los medios para tapar la debacle social y económica”.
Advirtió, además, que quieren “estirarlo lo más que puedan”, tras lo cual agregó: “Que se trate el 8M, aborto legal ya”.
“Si tanto interés tienen, que el 8 bajen sus diputados al recinto”, desafió la legisladora kirchnerista.
En la misma línea, Del Plá sostuvo que “cuando (el presidente Mauricio) Macri habilita este debate, es porque quiere darle un golpe al PJ, que habla en nombre del Papa” y agregó: “Lo que tiene que hacer (el oficialismo) es aprobar la sesión especial, tratarlo y aprobarlo”.
“Esto no se tiene que convertir en un show mediático. Si están de acuerdo, tienen que concurrir a la sesión especial del 8M y darle tratamiento inmediato”, agregó la diputada del Frente de Izquierda.
Por su parte, la diputada radical Carla Carrizo -que integra el espacio encabezado por Martín Lousteau- sostuvo que “hay debates que atraviesan el ejercicio de la libertad” y aseguró que “hay un consenso social sobre este tema”.
No obstante, la legisladora anticipó la discusión (que será la primera en torno al proyecto) sobre los tiempos del debate y la fecha de la sesión, al advertir: “La sesión especial que teníamos prevista para el 8M ahora nos queda chica”.
La iniciativa deberá pasar por la comisión de Salud de la Cámara de Diputados, que será presidida por la oficialista Carmen Polledo, una legisladora de máxima confianza de Macri.
En declaraciones a un matutino porteño, Polledo -que tiene una postura de rechazo al aborto- aseguró que Cambiemos está “a favor de debatir este tema”, pero adelantó que la idea es acompañar el debate con otros proyectos para que la interrupción del embarazo “no se presente como la única alternativa”.
En efecto, la idea del oficialismo es debatir la iniciativa sobre despenalización del aborto junto con otras que consideran relacionadas con la misma problemática, como el alquiler de vientres, la facilitación de trámites de adopción y una mayor ayuda económica a las embarazadas.
De esta manera el oficialismo intentará reunir consenso para que el debate en las comisiones se prolongue y evitar así un tratamiento rápido, como pretenden las legisladoras que pedirán votar el proyecto del 8 de marzo.
En tanto, en el interbloque de Cambiemos ya se anticipan algunas opiniones negativas sobre la despenalización del aborto, como es el caso del diputado Eduardo Cáceres, quien adelantó que “no dan los números en Diputados y menos en el Senado para que avance una ley de aborto”.
Por su parte, el ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, afirmó que “no” está “a favor del aborto”, y destacó su apoyo a las leyes vigentes de Educación Sexual Integral (ESI) y de salud reproductiva.
“Estoy a favor al derecho de la vida humana, no estoy a favor de la pena de muerte, no estoy a favor del aborto”, afirmó el titular de la cartera educativa en declaraciones a Radio Continental tras participar de un acto acto junto al Presidente Mauricio Macri y la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal.
Finocchiaro aclaró que sí está a favor del uso de “los anticonceptivos, de preservativos, dispositivos intrauterinos, y de cualquier método de prevención del embarazo”.
Neutralidad oficial
Por su parte, el jefe del bloque de senadores nacionales del PRO, Humberto Schiavoni, aclaró ayer que el oficialismo no “instala ni promueve” proyectos de despenalización del aborto, pero tampoco los bloqueará en su camino en el Congreso.
Además, el legislador afirmó que si las propuestas en ese sentido logran avanzar, el frente Cambiemos permitirá que “cada uno vote de acuerdo a sus convicciones”.
“Es un tema que no lo instala ni lo promueve nuestro espacio político”, resaltó Schiavoni, quien evaluó que la despenalización del aborto es un planteo que “está en muchos sectores de la sociedad”.
El jefe de la bancada de senadores del PRO indicó que la posibilidad de tratarlo en el ámbito del Congreso fue conversada entre funcionarios y legisladores del oficialismo en una reunión mantenida este jueves en la Casa de Gobierno.
En el marco de ese encuentro denominado “de coordinación de la agenda parlamentaria”, hubo coincidencias en que “el tema empezó a escalar en la agenda pública, con las distintas manifestaciones como la que se hizo frente al Congreso con los pañuelos”.
Schiavoni precisó, en tanto, que el presidente Mauricio Macri “no estaba” en esa reunión y puntualizó que durante ese debate, el PRO no tomó “una decisión”, pero sí acordó que “si el tema se trataba (en el Congreso) había que debatirlo y preservar para cada uno la decisión que correspondiera a sus convicciones”.
Además, reconoció que “hay distintas iniciativas legislativas presentadas” y aseguró que la postura del bloque oficialista será que “cada legislador vote de acuerdo a sus convicciones morales, religiosas y personales”.
Dentro del frente Cambiemos, los legisladores tendrán libertad de acción, aunque los conteos previos indican que la mayoría del bloque PRO está en contra del aborto, en tanto que en la Unión Cívica Radical hay más paridad.