Es el tema central del XIII° Simposio de Contabilidad y Auditoría del Extremo Sur” que realiza por estos días la Universidad Nacional de Tierra del Fuego.
USHUAIA.- Un centenar de estudiantes y profesionales vinculados a ciencias económicas participan del XIII° Simposio de Contabilidad y Auditoría del Extremo Sur” que se celebra en la sede Ushuaia de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, con la participación especial de importantes panelistas del ámbito profesional, académico, nacional y local.
Bajo el lema: “El sistema de información contable ante los cambios paradigmáticos que afectan a la profesión (Blue Economy)” por estos días se debaten diversas temáticas en materia de contabilidad y auditoria, entre ellas el cambio de paradigma que propone la disciplina de la economía azul, principios establecidos por Gunter Pauli, cuyo planteamiento impulsa que las empresas sean eficientes a la hora de producir bienes y servicios
De este modo, la economía azul (paradigma que superó el concepto de economía verde) busca sacar el máximo partido a los recursos disponibles, todo ello sin olvidar que los residuos también tienen que ser aprovechados y considerados otra fuente de riqueza.
La docente investigadora del Instituto de Desarrollo Económico e Innovación (IDEI/UNTDF, Cdra. Maia Gessaga, miembro del comité organizador del XIII° Simposio de Contabilidad y Auditoría del Extremo Sur” destacó: “Este evento tiene una larga tradición en el calendario académico fueguino y nacional, cuyos debates sin dudas trascienden ya que aquí se empiezan a discutir temas que luego se replican en las agendas, en el resto del país”. “Creemos que estos cambios de paradigmas pueden aportar a la formación de los nuevos profesionales, para prepararlos para los nuevos desafíos que enfrenta la profesión” sostuvo la académica.
Respecto a los trabajos presentados en esta edición del Simposio, Gessaga consideró que “hay mucho avanzado en reconocer que los recursos del planeta son escasos, que los desperdicios que genera la actividad humana son demasiados y que la competencia se tendría que transformar en cooperación, para crear nuevos ciclos económicos que puedan ser sustentables, al igual que sucede en la naturaleza”, reflexionó la investigadora.
