El aviso ARA “Bahía Agradable” inició la Patrulla Antártica Naval Combinada. El lunes asumió como Buque de Servicio Antártico en cumplimiento de la primera etapa de esta actividad que desde hace más de dos décadas realizan la Armada de nuestro país con la de Chile.
USHUAIA (La Gaceta Marinera).- El aviso ARA “Bahía Agradable se encuentra en la Antártida y ya cumple funciones como “Buque de Servicio Antártico” en el marco de la primera etapa, denominada ALFA, que comenzó el lunes.
El miércoles 10, la unidad de la Armada Argentina zarpó del muelle comercial de la ciudad de Ushuaia y puso proa al continente blanco con el objetivo de dar inicio a la Patrulla Antártica Naval Combinada (PANC) 2021/22.
Al momento de la zarpada se contó con la presencia del Comandante del Área Naval Austral, Contraalmirante Marcelo Alejandro Dalle Nogare, junto a la Banda de Música del Área Naval Austral (ANAU).
El aviso ARA “Bahía Agradable” será relevado a mediados de diciembre por el ATF-66 ARCH “Galvarino” de la Armada de la República de Chile, a cargo de la segunda etapa (BRAVO).
A continuación, el “Bahía Agradable” retornará a Ushuaia como Buque de Apoyo Antártico (BAA), para volver al continente blanco y cumplimentar la tercera etapa (CHARLIE) desde el 23 de enero hasta el 26 de febrero de 2022. El cierre de la actividad estará a cargo del buque chileno ATF-66 “Galvarino”, que se replegará a Punta Arenas los primeros días de abril de 2022.
El objetivo de la PANC es brindar un servicio de búsqueda, rescate, salvamento marítimo, control y combate de la contaminación, con el propósito de otorgar seguridad a la navegación, a la vida humana en el mar y contribuir a mantener las aguas libres de contaminación, al Sur del paralelo 60º Sur, en cumplimiento del Tratado Antártico.
La Patrulla Antártica Naval Combinada XXIII tendrá una extensión de cuatro etapas, finalizando el 31 de marzo de 2022.
Trayectoria de la PANC
La Patrulla Antártica Naval Combinada (PANC) surgió de los acuerdos del Tratado de Paz y Amistad de 1984 con el objetivo de salvaguardar la vida humana en el mar y preservar el medioambiente. Su desarrollo depende operativamente de los comandos del Área Naval Austral (ANAU) por parte de la Armada Argentina y de la Tercera Zona Naval (TERZONA) de la Armada de Chile, desarrollándose de manera ininterrumpida desde 1998.
Esta actividad representa el esfuerzo conjunto que las Armadas de Argentina y Chile realizan para patrullar y velar por la seguridad náutica en una zona que tiene gran afluencia de buques, ya que durante la temporada estival se incrementa el tráfico marítimo en la Antártida debido a las actividades científicas, turísticas y comerciales. Por ello, la patrulla cobra suma relevancia, lo que incluso le llegó a valer el reconocimiento de la Organización Marítima Internacional (OMI).