BUENOS AIRES.- El aviso ARA “Puerto Argentino”, al mando del Capitán de Corbeta Pablo Polack, tomó amarras en el muelle del Apostadero Naval Buenos Aires después de concluir sus tareas logísticas en el continente blanco, en el marco de la Campaña Antártica de Verano (CAV) 2024/25.
Al momento del arribo, mientras los integrantes de la Banda de Música del Estado Mayor General de la Armada interpretaban marchas militares, el buque fue recibido por el Comandante Conjunto Antártico (COCOANTAR), Comodoro de Marina Maximiliano Mangiaterra, quien estuvo acompañado por otras autoridades navales y del COCOANTAR.
El ARA “Puerto Argentino”, que había zarpado desde Buenos Aires el 22 de noviembre para constituirse como soporte logístico de las actividades que se llevan a cabo en el continente blanco, navegó un total de 15.419 millas náuticas (28.555,98 kilómetros).
Durante las tres etapas de la CAV, en la que retornó a Buenos Aires para cargar combustible, víveres y material, el buque permaneció 61 días en aguas antárticas y estuvo 135 días desplegado bajo el control operacional del COCOANTAR.
Durante su participación operó en ocho bases antárticas argentinas: las Bases Antárticas Conjuntas (BAC) Esperanza, Brown, Decepción, Petrel, Cámara y Primavera; y la Base Científica Carlini. A los que se sumó una chilena, la Base Presidente Eduardo Frei Montalva.
La unidad se abocó principalmente al transporte de carga (víveres, combustibles, estructuras del proyecto Petrel) y personal desde el continente hacia las bases y entre estas. Durante su derrota antártica llevó a cabo, entre otras tareas, la inspección previa de las Bases Decepción, Melchior y Cámara; el traslado de estructuras para el proyecto de la BAC Petrel.
Asimismo, concretó el repliegue de personal militar y científico de las bases Brown y Esperanza, efectuando además la apertura y cierre de la BAC Decepción.
A su vez, embarcó personal del Servicio de Hidrografía Naval (SHN) que realizó relevamientos en diversos sectores de la Antártida Argentina y obtuvo información de gran valor para la navegación.
El buque operó junto al logístico ARA “Patagonia” y con el rompehielos ARA “Almirante Irízar”, para reabastecerse, a fin de extender su capacidad operativa.
En cumplimiento del Tratado Antártico, llevó a cabo tareas de evacuación de residuos antárticos clasificados (ERAC) que luego fueron transportados al puerto de la ciudad de Ushuaia para su disposición final.
Contribuyendo con la instrucción, a bordo de esta Unidad naval embarcaron nueve Cadetes de la Escuela Naval Militar, quienes no solo tuvieron la oportunidad de conocer el continente blanco, sino que principalmente pudieron afianzar los conocimientos adquiridos en las aulas, como parte de la dotación. Totalmente integrados, formaron parte de los equipos de maniobra y operaciones, contribuyendo y aprendiendo en el proceso.
Como es habitual, embarcó personal del Servicio de Salvamento de la Armada como dotación complementaria, que hizo “más eficiente y seguro el empleo con embarcaciones menores y llevó adelante inspecciones a la unidad para asegurar su continua integridad”, señaló el Segundo Comandante del buque, Teniente de Navío Rodrigo Fernández Méndez.
Un total de 75 personas formaron parte de la dotación, quienes desde cada uno de sus puestos, “hicieron a la conformación de un solo equipo con un solo espíritu. Todos volvieron ansiosos del reencuentro con sus familias, pero sabiendo que esa distancia les significó ser parte de un logro muy importante”, destacó el Teniente Fernández Méndez.