Continúan desarrollándose trabajos e investigaciones en el marco de la lucha contra el coronavirus en todo el mundo. Desde mediados de 2020, profesionales del Conicet vienen desarrollando barbijos especiales, los cuales logran un importante efecto a la hora de combatir el virus.
RIO GRANDE.- Uno de los últimos logros obtenidos, fue el desarrollo del barbijo N95 Plus, el cual fuera creado por un grupo de especialistas en infectología del reconocido Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina.
En diálogo con FM Fuego, la Dra. Griselda Polla de la Universidad San Martín y el Instituto de Investigación e Ingeniería Ambiental del Conicet, brindó detalles sobre el trabajo logrado en el instituto nacional.
Inicialmente, acerca de los barbijos desarrollados hasta el momento, explicó “la diferencia que tienen estos barbijos con los comunes, es que las telas con las que fueron confeccionados tienen un tratamiento especial. Se les han adicionado activos químicos que le dan propiedades antivirales, bactericidas y fungicidas”.
Actualmente “estamos sacando un nuevo modelo, que no sólo tiene esta barrera de activos químicos, sino que se le ha agregado un filtro físico adicional y eso le incrementa la capacidad filtrante, tanto para polvos, como para pequeñas gotículas que pueden llevar virus y bacterias dentro de ellas”.
“El barbijo de la versión original tenía una capacidad filtrante de un 70%. Los nuevos barbijos N95 PLUS tienen una capacidad del 99,9%, estamos muy contentos con estos logros” expresó.
Comentó que a partir del mes de enero “muchos países, como Alemania y Francia, estaban recomendando una mayor protección, no sólo con un tapabocas común, sino que pedían máscaras con mayor capacidad filtrante” y señaló “estos barbijos cumplen esa tarea”.
En dicho sentido detalló “están reteniendo casi el total de las partículas que pueden penetrar. Nos protegen de gente y nosotros protegemos a otras personas”.
“Estos barbijos se usan especialmente para espacios cerrados como transporte público o atención al público. Al estar al aire libre se pueden seguir usando los anteriores”, agregó.
Aclaró que “los barbijos originales se pueden lavar hasta 15 veces porque está comprobado que siguen manteniendo sus propiedades. El nuevo barbijo N95 PLUS, debido al nuevo filtro, no es lavable. Son descartables, pero se pueden usar muchos días”.
Destacó que este nuevo barbijo “tiene un ajuste nasal que ayuda a que se quede fijo y no se caiga cuando hablamos”.
Sostuvo que “los barbijos no requieren aprobación de ANMAT porque son de uso social. Sí están aprobados por el Nelson Labs de Estados Unidos y tienen la certificación de la Unión Europea”.
Consultada sobre los barbijos de tela aconsejó “se puede hacer una mezcla de dos telas, que tenga doble capa con una tela interna y otra externa, pero distintas. Eso hace que haya diferentes fibras y retiene mucho más las partículas. Un barbijo tiene que cumplir con la respirabilidad, hay que acostumbrarse porque vamos a estar uno o dos años más con barbijo” comentó.
“El tapaboca común se tiene que usar hasta 4 horas y después de ello hay que lavarlo o rociarlo con alcohol, porque cuando uno respira se genera humedad y se pueden producir hongos” aconsejó.
El grupo desarrollador está integrado por Silvia Goyanes, Roberto Candal, Griselda Polla y Ana María Llois y además participan investigadoras, investigadores, becarios y becarias del IFIBA- DF-UBA, IIIA-UNSAM, ANPCyT y CONICET.
El trabajo fue realizado por científicas y científicos del CONICET, la Universidad de Buenos Aires (UBA) y la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM), con el apoyo de la PYME textil Kovi S.R.L.