La presidenta del Senado, Cristina Kirchner, convocó ayer a una sesión especial para mañana jueves con el fin de tratar el proyecto de presupuesto 2021, que sería convertido en ley en caso de ser aprobado.
BUENOS AIRES (NA).- Pese a la holgada mayoría que tiene en la Cámara alta, el Frente de Todos pretende contar con algún apoyo por parte de la oposición para aprobar el proyecto con el fin de enviar una señal de respaldo político al FMI en el marco de la negociación por el refinanciamiento de la deuda.
De hecho, la convocatoria a la sesión coincide con la llegada al país de los enviados del organismo de crédito para reunirse con el ministro de Economía, Martín Guzmán, con el fin de evaluar el plan económico del Gobierno de cara al próximo año.
Durante el rápido debate del proyecto en la Comisión de Presupuesto y Hacienda, los senadores del Frente de Todos mostraron su interés en que la aprobación de la ley cuente con respaldo opositor para robustecer la postura del Gobierno en las negociaciones con el FMI.
Así lo sugirió el jefe del bloque Frente de Todos, José Mayans, en aquella reunión de la semana pasada, donde afirmó que “sería importante poder dar esta herramienta para poder ir al Fondo Monetario Internacional”.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Presupuesto, Carlos Caserio, dijo en el mismo sentido que “si el Senado acompaña con su voto, para el país sería un adelanto significativo de que la política acompaña al que gobierna”.
El interbloque de Juntos por el Cambio evitó asumir una postura que demorara la firma del dictamen pero tampoco garantizó su acompañamiento al proyecto de presupuesto 2021 y, según supo NA, definirá su posición en la reunión de interbloque de este miércoles.
El presupuesto 2021 prevé un crecimiento de la economía del 5,5%, una inflación cerca de 29% y un déficit fiscal de 4,5% del PBI, al tiempo que estima un crecimiento de las exportaciones del 10,2% para 2021 y un aumento de las importaciones de 20,4%