Una ciudad inundada por el agua, autos destruidos, casas sin techos, fue el panorama que dejó el temporal de lluvia y viento en Ushuaia, donde la madrugada del miércoles cayeron 13 milímetros de agua. Desde el Cuartel Central de Bomberos advirtieron que el tipo de construcción de las viviendas, en algunos sectores, no es el óptimo para la velocidad de las ráfagas que hay en la zona.
USHUAIA.- El jefe del Cuartel Central de Bomberos, Hugo Canseco, se refirió al trabajo realizado por personal de la institución como también de Defensa Civil, y expresó que “sabíamos que íbamos a tener que trabajar pero no de esta manera”.
“Esa madrugada se sumaron factores que complicaron la situación, y entre las 6:00 y 8:30 se desbordó todo, no dábamos abasto, hubo personas que tuvieron paciencia, que pudieron entender la situación”, agradeció.
En la ciudad, tanto los bomberos como personal de Defensa Civil, trabajaron arduamente en muchos sectores, “hubo algunos que fueron más complicados que otros, por ejemplo las zonas de Dos Banderas y Andorra, donde quedó un desastre. En esos sectores el destrozo no fue consecuencia del viento en sí sino que también contribuyeron los árboles viejos que cayeron sobre las viviendas, que dejaron casas totalmente destruidas”.
Al igual que en el barrio Bosque del Faldeo y El Ecológico, donde cayó un árbol arriba de un auto cortando la línea de media tensión”, mencionó el Jefe del Cuartel de Bomberos.
En la zona centro de la ciudad, los bomberos hasta tuvieron que asistir a automovilistas que se habían quedado varados en Maipú y Guaraní, donde había mucha agua.
Canseco ironizó que de los 34 años de servicio que tiene como bombero, nunca había visto tanta agua, ya que cayeron 13 milímetros en 12 horas, y citó el caso del Paseo de las Rosas, “faltaban los cisnes nada más y teníamos el lago de Palermo.
Por otro lado, sostuvo que “no se hizo tiempo a limpiar los alcantarillados, porque han arrastrado los bloques de hielo de las montañas que se habían acumulado y que no habían sido retirados, y lógicamente se taparon”.
“Las tapas que se encuentran en los pluviales en medio de las calles se levantaban y expulsaban el agua. Fue una situación complicada, porque no se pudo atender a todos al mismo tiempo”.
Hugo Canseco apuntó a los vecinos que tienen en el fondo de sus casas árboles viejos, que deberían retirarlos en virtud del peligro que ocasiona en temporales como el que hubo anteayer.
En ese sentido, analizó que “cuando uno sabe que la zona será urbanizada ya de antemano tiene que bajar los árboles y después preservar otro poco. Cada uno en su predio tiene que ser responsable de lo que tiene”.
También se refirió al tipo de construcción de viviendas en los barrios altos de la ciudad, y señaló que “todos sabemos de algunas tipologías ya antiguas que todavía se siguen utilizando, que están hechas sobre madera o casas hechas sobre tachos”.
“El arte de la construcción se ha perdido, en muchas viviendas los profesionales no actúan en su construcción. Cuando vuelan techos tenemos que considerar que son ráfagas de 100 kilómetros, pero cuando un profesional construye en estas zonas tiene que hacerlo para vientos que soporten arriba de los 200 kilómetros”.