La decisión abre un nuevo capítulo para la energía nuclear en el país.
Estados Unidos acaba de dar luz verde a su primer diseño de reactor nuclear modular pequeño, un paso adelante prometedor para una fuente de energía que sigue siendo controvertida entre algunos defensores del clima, pero que está experimentando un renacimiento popular.
La Comisión Reguladora Nuclear aprobó el diseño, que se publicó el jueves en el Registro Federal. La compañía registradora es NuScale, una empresa de reactores nucleares con sede en Oregón. La publicación del diseño en el Registro sirve para que las compañias eléctricas puedan seleccionar este tipo de reactor al solicitar una licencia para construir una nueva instalación nuclear. El diseño consiste en un reactor de aproximadamente un tercio del tamaño de un reactor habitual, con cada módulo capaz de producir alrededor de 50 megavatios de potencia.
Además de ser un primer paso histórico para reactores modulares pequeños, el modelo de NuScale es también el séptimo diseño de reactor nuclear general aprobado por el gobierno de EE. UU. La energía nuclear es una fuente de electricidad libre de carbono que puede proporcionar valiosa energía de base cuando las energías renovables no están operativas (no siempre hay suficiente viento o suficiente sol). Los pequeños reactores modulares “ya no son un concepto abstracto”, explicó la subsecretaria de Energía Nuclear de Estados Unidos, Kathryn Huff, en un comunicado. “Son reales y están listos para su implementación gracias al arduo trabajo de NuScale, la comunidad universitaria, nuestros laboratorios nacionales, socios de la industria y la NRC. Esto es innovación en su máxima expresión y apenas estamos comenzando aquí en Estados Unidos” concluyó.
La energía nuclear se ha enfrentado a una montaña de desafíos en las últimas décadas debido a varios factores. El principal de ellos es el costo y la flexibilidad de la construcción. Los reactores tradicionales son proyectos de infraestructura masivos que a menudo tardan décadas en construirse y pueden verse afectados por costos crecientes, lo que hace que la energía que producen sea más costosa a corto plazo que la proveniente de fuentes como el gas natural o las energías renovables. Los reactores modulares pequeños, conocidos como SMR, resuelven algunos de estos problemas al estar hechos de piezas que pueden fabricarse en cadena y luego enviarse al sitio donde vaya a construirse. Esto hace que su puesta en marcha inicial sea mucho menos costosa y lenta. Por no mencionar que además ocupan menos espacio.
Por desgracia, el hecho de que un diseño esté en los libros del gobierno no significa que sea fácil para la industria construirlo o que todas las redes eléctricas del país vayan a funcionar con electricidad nuclear libre de carbono en unos pocos años. NuScale está trabajando actualmente en una planta de demostración de seis módulos en Idaho que estará en pleno funcionamiento para 2030. La compañía explicó este mes que sus estimaciones del precio por megavatio hora de esta planta de demostración habían subido más del 50% desde sus últimas estimaciones. Es un incómodo eco de los crecientes costos asociados con otros proyectos nucleares tradicionales.
Además, los pequeños reactores modulares aún producen desechos nucleares, lo que, según algunos ambientalistas, es una preocupación que no puede pasarse por alto a medida que se desarrolla esta industria. El ritmo del desarrollo nuclear también es un desafío para algunos defensores del clima, que aseguran que la industria es demasiado lenta para responder a la necesidad inmediata de descarbonizar. Otros, sin embargo, argumentan que las energías renovables por sí solas no serán suficientes para satisfacer las enormes demandas de energía verdaderamente libre de carbono, y que desarrollar la energía nuclear es una de las mejores estrategias para sacar al mundo de su adicción a los combustibles fósiles. A falta de que los reactores de fisión sean viables, desde luego puede que sea así.
Es posible que la introducción de un diseño de reactor modular pequeño no resuelva algunos de los problemas más persistentes en torno a la tecnología nuclear ni el debate dentro del movimiento ambientalista sobre el papel de la energía nuclear en el futuro, pero sin duda es una señal convincente de lo que podría estar en el horizonte.