El inicio del lunes no fue fácil, la primera noticia que invadió el cuerpo de todos los amantes del deporte no fue la mejor; siendo las 07:00 falleció en el hospital de Río Grande Alberto “Chinchu” Kovacic, el menor de la mítica familia que tanto hizo por el deporte de la ciudad y que junto a su hermano Luis, nos dieron el primer torneo Argentino de Selecciones Mayores de Futsal fuera de casa.
RIO GRANDE.- Chinchu padecía de diabetes y desde un tiempo a esta parte la enfermedad lo había acorralado hasta que su corazón a los 60 años dijo basta.
Como deportista se destacó en fútbol de salón, donde no sólo se destacó en Mercado Kovacic y San Martín, sino que además integró diferentes seleccionados fueguinos e incluso fue convocado a la Selección Argentina que dirigía el formoseño Waldino Alfonso donde jugó el Sudamericano de 1986 en Puerto Iguazú, Misiones.
También defendió los colores de San Martín en básquetbol, siempre al lado de su hermano, el Gringo.
Más allá de los recordados clásicos ante Tolhuin que brillaron durante toda una década (85/95), a Chinchu se lo recordará como un gran entrenador en la última parte de esos choques, dado que una vez que se coronó campeón con Tierra del Fuego en el ’91, su carrera deportiva la dejó de lado, jugó algunos juegos el año siguiente, pero por algunas lesiones que lo tenían a mal traer y sus ganas de sumarse a su hermano a dirigir a San Martín y a la selección riograndense, fue que se dedicó de lleno a orientar conjuntos.
Primero fue clave en Rosario ’93 cuando Río Grande representando a la Provincia alcanzó el primer título fueguino fuera de la Isla, los dos anteriores siempre fueron en casa; luego en San Martín junto a su hermano, llevaron a un club riograndense a lo más alto posible, se coronación campeones nacionales en casa al vencer en 1994 a Servando Bayo de Rosario en una final antológica, clasificando así por primera vez a un Sudamericano de Clubes donde representaron a la Argentina en 1995.
Esa cita fue en Sucre, Bolivia, y de ser la cenicienta fueron los más aplaudidos por los fervorosos hinchas bolivianos que los tomaron como elenco favorito, venciendo en esa oportunidad al mejor elenco del mundo, General Garay de Paraguay, alcanzado un meritorio tercer lugar.
A Chinchu le gustó siempre remar contra la corriente y se enfrentó a distintos dirigentes, ya sea en su club como en la Federación, debió luchar por afuera para cumplir su sueño de llevar de gira a la Selección de Río Grande por gran parte de Europa, hasta que finalmente no sólo cumplió el sueño sino que también alcanzó el reconocimiento de los dirigentes locales.
En su haber, no sólo están los títulos alcanzados con su amado San Martín, sino que además será recordado por dirigir a O’Higgins y a su archirrival de toda la vida, Tolhuin. Fue en un Provincial y la noticia en ese entonces fue sorprendente, y él lo disfrutó como pocas veces, le encantaba la controversia, lo llenaba de vida, lo fortalecía.
Ayer desde las 15:30, la sede social del Club San Martín quedó a disposición de la familia para su último adiós, por la institución desfilaron muchísimos amigos, compañeros y rivales, llegando gente de Ushuaia, incluso, y por su forma de ser, como buen Kovacic que era, fue muy querido y respetado y así lo manifestaron anoche hasta el cierre de esta edición. Hasta siempre ganador.