BUENOS AIRES (NA).- Luego de una jornada de complicaciones, el arquero Franco Armani llegará hoy a Miami para sumarse a la pretemporada de River, cuya dirigencia logró resolver la presentación de los avales bancarios para ejecutar la cláusula de rescisión impuesta por Atlético Nacional de Colombia.
La transferencia, que se dilató durante casi 48 horas, llega de esta forma a su fin y permite al entrenador Marcelo Gallardo tener al arquero que había pedido para aumentar la competencia en el puesto. Armani firmó un contrato por tres años.
Ayer por la mañana, el club de Colombia publicó un comunicado en el cual dio a conocer su versión de los hechos y el mismo señaló en el comienzo: «Atlético Nacional quiere dar claridad a los hinchas, opinión pública y medios de comunicación por la compra de River Plate de los servicios del arquero Franco Armani».
Para que el arquero pueda jugar en Argentina, River Plate debe pagar la cláusula de rescisión, la cual debe cancelarse de manera inmediata, no siendo esto un capricho sino una medida que se toma en todos los casos donde deba pagarse dicha cláusula.
Aún así, Atlético Nacional con el fin de que Franco Armani cumpla su sueño, accedió (acuerdo entre ambos clubes) a que el monto de la cláusula se pagara: un primer pago de contado y dos más, diferidos a seis y doce meses. «Estos dos últimos ligados a una garantía bancaria», se indicó en el escrito.
Entretanto, Lucas Zelarrayán -surgido en Belgrano de Córdoba- fue tasado en 10 millones de dólares por Tigres y River no estaría dispuesto a abonar esa cifra mientras que la entidad de México determinó que no lo ofrecería a préstamo, por lo cual se complicó su llegada al club de Núñez.