El secretario general de Gastronómicos a nivel provincial, Ramón Calderón brindó un panorama desolador para el sector. “En toda la provincia se han pedido unos 1000 puestos de trabajo que representa un 70% del total. Insistió en que desde Gobierno, la ayuda es casi nula.
RIO GRANDE.- La difícil situación del sector hotelero y gastronómico de la provincia ya no es noticia. Desde el comienzo del aislamiento el sector fue uno de los más castigados y las consecuencias son notables.
Al respecto, el secretario General de UTHGRA (Unión de Trabajadores Hoteleros Gastronómicos de la República Argentina), Ramón Calderón vertió un panorama desolador. “Nuestro principal interés fue el de volver a la actividad y lo hemos logrados con algunas complicaciones ya que hay empresarios que no logran cubrir las necesidades para cumplir con los protocolos que se imponen”.
Explicó que “muchos trabajadores no han podido cobrar sus sueldos en tiempo y forma y ahora tenemos el problema de que tampoco logran cobrar sus aguinaldos, pero también sabemos que es una situación complicada para los empleadores que no han tenido recaudaciones en dos meses por eso comprendemos la situación, pero no deja de ser desesperante”.
El gremialista entendió que para salir del ahogo, el sector gastronómico necesitará de la mano del Gobierno que, por estas horas “no nos atiende el teléfono”.
Pérdidas de empleos
Analizó que la situación en toda la provincia es complicada. En Río Grande, la pérdida de empleos ha sido notablemente más amplia que en Ushuaia. “Un 70% de los empleados gastronómicos de Río Grande se han quedado sin trabajo”, afirmó.
Calderón insistió que de la única manera que el sector tiene para poder reactivar es con una inyección de dinero.
El sector gastronómico riograndense, la situación ha sido terrible porque “hay una gran cantidad de locales que han cerrado sus puertas de manera definitiva y, los que se mantienen activos, tienen muchos problemas para afrontar sus gastos entre los que se cuenta el pago a los empleados”.
Reveló que hay empleadores que soportan sólo porque han reducido los sueldos de los empleados para evitar despidos.
En las fábricas de Río Grande se pudo ingresar trabajo gastronómico y se ha continuado de manera casi regular, según indicó Calderón.
En la provincia
“Hemos tenido contacto con muchos empleadores que hasta les han ofrecido a sus empleados hasta utensilios de cocina a modo de pago. Cuando insisto en que necesitamos que el Gobernador nos atienda es porque realmente estamos en una situación desesperante pidiendo que el Gobierno atienda o que el Gobernador nos atienda. Si no quiere atender a la gente del sindicato, necesitamos que atienda a este grupo de empresarios que son más de 40 que se encuentran en una situación que no pueden sostener”, reprochó.
Agregó que en el sector, “necesitamos que vea la necesidad que tiene nuestro sector. Nosotros estamos haciendo un esfuerzo enorme para mantener a sus locales y no despedir gente pero no se puede entender que pasen cosas como pasan acá en Río Grande donde me encontré con locales gastronómicos que han recibido inspecciones de Comercio de Gobierno que justamente están haciendo un esfuerzo enorme para poder mantener sus puestas abiertas. La gente de Comercio de Gobierno le está buscando el pelo al huevo para multar”.
Respecto del futuro avizoró que si la situación continúa de la misma manera, “Se seguirán perdiendo puestos de trabajo. Por eso necesitamos que el Gobierno intervenga y atienda el reclamo de los empleados y de los empleadores”.
Dijo que hay muchos locales que han abierto sus puertas, pero no logran recaudar para pagar las obligaciones y, en la mayoría de los casos, los empresarios han abierto a pérdida.
Finalmente aseguró que ya existe la confirmación de locales comerciales hoteleros y gastronómicos que cerrarán sus puertas en breve.