El propósito fundamental de este proyecto es incrementar las exportaciones, crear empleo, fortalecer la competitividad de los diversos sectores económicos y fomentar un crecimiento económico sustentable y equitativo.
BUENOS AIRES (NA).- El Gabinete Económico resolvió ayer avanzar en la implementación de un nuevo régimen de fomento de la inversión para incrementar las exportaciones.
El objetivo será “aumentar la previsibilidad” de la inversión extranjera directa, o de la nacional financiada con crédito externo.
La iniciativa, que en los próximos días será plasmada en un decreto, propone que, para nuevas inversiones que incrementen las exportaciones previa aprobación, sea posible usar la generación de divisas para repatriación de capital e intereses.
“El régimen prevé que el 20% de las divisas obtenidas en las exportaciones vinculadas a una nueva inversión serán de libre aplicación por hasta un máximo anual equivalente al 25% del monto bruto de divisas ingresadas para el proyecto”, detallaron.
En ese sentido, precisaron que el 20% de las divisas obtenidas “podrá destinarse al pago de capital e intereses de pasivos en el exterior, utilidades y dividendos de balances cerrados y auditados, y repatriación de inversiones directas de no residentes”. .
Tras la reunión de gabinete económico que se realizó en Casa Rosada, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, explicó que “uno de los problemas centrales de nuestra economía es la escasez de dólares”, lo que “se explica por varios factores, entre los que se destacan nuestra estructura productiva, el bajo dinamismo de nuestras exportaciones y la dolarización de inversiones financieras”.
En ese sentido, indicó que la situación “se agravó en los últimos años por una política de endeudamiento en moneda extranjera irresponsable y la falta de una mirada estratégica en el desarrollo productivo y el abandono de la política industrial”.
“Las restricciones cambiarias permiten administrar la escasez de divisas, pero generan trabas para la inversión extranjera o la inversión nacional financiada con crédito externo”, agregó.
Respecto de la creación de este régimen, afirmó que “flexibiliza estas restricciones y permite viabilizar muchos proyectos de inversión actualmente en estudio”.
“El régimen establece un mecanismo muy claro y previsible que le permite a las empresas que ingresen dólares del exterior tener mayores certezas sobre el repago de la inversión o del financiamiento asociado”, explicó.
Por su parte, el ministro de Economía, Martín Guzmán, subrayó que “esta medida consiste en una adaptación del esquema de controles de capitales de modo de favorecer las inversiones en la economía real, mientras se siguen desalentando los movimientos de capitales de corto plazo y de tipos especulativos que generan inestabilidad cambiaria”.
“Durante la administración anterior se desreguló prácticamente de forma completa la cuenta de capital financiero y eso no redundó en un aumento de la inversión externa en la economía real. Por el contrario, lo que generó fue una entrada de capitales que vinieron a especular sobre oportunidades de retornos financieros altos en el corto plazo sin darle nada a la economía real”, apuntó.
“La medida que estamos anunciando va a implicar inversiones concretas de empresas que van a estar generando trabajo y producción en Argentina y aumentando la capacidad exportadora del país, en sectores como el minero, industrial, agroindustrial y energético”, explicó.
Por su parte, el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, indicó que el proyecto “otorga beneficios al ingreso de capitales asociado a la inversión y la creación de empleo y no a la economía especulativa”.
La autoridad de aplicación de este régimen estará conformada por representantes de los Ministerios de Economía y Desarrollo Productivo, y el Banco Central de la República Argentina hará la evaluación técnica de los proyectos a fomentar.
El régimen de fomento está previsto para inversiones de los sectores foresto industriales, agroindustriales, hidrocarburífero, minero y de industrias manufactureras, ya sea en nuevos proyectos o en aquellos existentes pero que busquen ampliar su capacidad productiva a fin de exportar.
En cambio, no se consideran como inversiones a las colocaciones financieras y/o de portafolio; a la fusión o adquisición de empresas; o a la compra de cuotas y/o acciones o participaciones societarias.
Podrán aspirar al beneficio -que tendrá una duración de 15 años- personas humanas o jurídicas, nacionales o extranjeras que presenten un proyecto de inversión no menor a U$S 100 millones, en caso de ser una nueva inversión y que aumenten en no menos del 30% la capacidad productiva del negocio en marcha.
La reunión del Gabinete Económico estuvo encabezada por la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca Bocco, y contó con la participación de Kulfas, Guzmán y Pesce, además del ministro de Trabajo, Claudio Moroni; y la titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Mercedes Marcó del Pont.