En mayo del año pasado, a través de un acuerdo con el Gobierno provincial, la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (AFARTE) se comprometió a conformar -en un plazo de dos años- un fondo de 100 millones de dólares para destinarlos a “proyectos económicamente viables”. Sin embargo, hasta ahora no ingresó ningún tipo de pago y desde el Ejecutivo analizan acciones para cobrar esos recursos.
RIO GRANDE.- Las empresas electrónicas radicadas en Tierra del Fuego que integran la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (AFARTE) no habrían aportado los fondos que acordaron el año pasado con el Gobierno provincial para constituir un fideicomiso para la concreción de proyectos de viviendas, energías alternativas y mejoramiento de la conexión por fibra óptica.
A raíz de esto, la Provincia analiza cobrarles 900 millones de pesos en concepto de las exenciones impositivas de las que gozaron estas compañías.
En mayo del año pasado, AFARTE se comprometió en un acuerdo rubricado con el Gobierno a conformar en el plazo de dos años un fondo de 100 millones de dólares para destinarlos a «proyectos económicamente viables», según había explicado el entonces presidente de la asociación de empresas, Alejandro Mayoral.
«No van a ser donaciones, sino proyectos económicamente rentables», había explicado el directivo y mencionó proyectos de «energías alternativas y planes de vivienda». En aquella oportunidad también se habló de mejorar la conexión por fibra óptica en Tierra del Fuego.
A poco de cumplirse un año del convenio, las empresas no habrían hecho ningún aporte al fideicomiso, lo que estaría generando preocupación en el Gobierno, al punto de estar evaluando cobrarles los 900 millones de pesos que sumarían las exenciones impositivas que también se acordaron oportunamente.
Fuentes allegadas a la Provincia ratificaron que hay «malestar» incluso porque los empresarios, a diferencia de las autoridades provinciales, han llegado a un estado de «comodidad» con las políticas nacionales en materia de industria, como la apertura de las importaciones.
Días pasados, representantes de AFARTE habrían confirmado a la propia gobernadora Rosana Bertone en una reunión en Buenos Aires que no se hizo ningún aporte al fideicomiso, que ya debería contar con al menos la mitad de los fondos comprometidos, es decir, 50 millones de dólares.
Finalmente, también trascendió que otra medida que analizaría el Gobierno sería la retención de los certificados que permiten a las empresas exportar hacia el Continente.