BUENOS AIRES (NA).– Envalentonado por su gran temporada en la Primera B, donde es líder, Deportivo Morón se impuso ayer a Patronato de Paraná, de Primera División, por 2 a 0, en cancha de Banfield, y avanzó a los 16avos de final de la Copa Argentina.
El capitán del Gallo, Damián Toledo, fue el autor del gol que adelantó a la visita, a los 25 minutos del primer tiempo, con una acrobática definición de chilena, para hacer estallar a la gran cantidad de público que llegó desde el Oeste del Gran Buenos Aires.
A los 25 minutos del complemento, y a través de otra jugada de pelota parada, el defensor Valentín Perales apareció en el segundo palo para empujar el balón y poner el 2-0 definitivo.
Morón, que se encamina al regreso a la B Nacional de la mano de Walter Otta como entrenador, espera ahora por el vencedor del duelo entre San Lorenzo y Cipolletti de Río Negro, que todavía no tiene fecha de disputa.
El Gallo fue el protagonista del primer tiempo, porque ejerció una presión constante sobre la salida del conjunto entrerriano, al que le costó mucho resolver esa situación.
Sin desequilibrio individual, Morón -que la edición pasada había eliminado a Aldosivi de Mar del Plata en esa misma cancha- estuvo más aplomado y con más confianza sobre el césped.
Es cierto, también, que casi todas las situaciones de peligro que generó fueron desde la pelota parada, algo que mostró muy bien trabajado.
Así llegó el gol que abrió el marcador, cuando Toledo se encontró con la pelota dentro del área y resolvió de manera sublime con una chilena espectacular que no pudo evitar Bértoli.
Pudo haber ampliado Morón con un cabezazo de Broggi, otra vez a la salida de un córner, pero la pelota se fue muy cerca del palo izquierdo del arquero de Patronato.
Los dirigidos por Rubén Darío Forestello, que todavía no lograron la permanencia en Primera División, trataron de cambiar la cara en el segundo tiempo.
Salieron un poco más arriba y con más decisión para manejar la pelota, pero no fue un dominio abrumador, por lo que Morón pudo ajustarse rápidamente.
Otra pelota parada iba a terminar de torcer la historia para el lado del Gallo: desvío de cabeza en un córner y en el segundo palo apareció Paredes para empujarla sin marca.
De ahí hasta el final, fue todo fiesta de la gente ubicada en la tribuna visitante del estadio “Florencio Sola”.
Morón se dio una alegría y ahora espera por el premio mayor: su retorno a la Primera B Nacional.