BUENOS AIRES (NA).- La vicepresidente de la Corte Suprema de Justicia, Elena Highton de Nolasco, aseguró que el máximo tribunal, con mayor o menor cantidad de miembros, «en todos los casos ha cumplido y cumple, eficazmente, su función constitucional».
«Atendiendo a la relevante función institucional de la Corte Suprema, es normal que su composición sea un tema merecedor de la preocupación social», sostuvo la integrante del alto tribunal.
Consultada acerca de la cantidad de jueces que deben integrar la máxima instancia del Poder Judicial, Highton de Nolasco destacó: «He integrado sucesivamente el Tribunal con nueve, ocho, siete, seis, cinco y, como en la actualidad, cuatro miembros. En todos los casos, la Corte ha cumplido y cumple, eficazmente, su función constitucional».
Asimismo, en una entrevista con Infobae, la magistrada se refirió a las críticas del kirchnerismo sobre su par Carlos Fayt, quien es duramente cuestionado por sus 98 años y es actualmente foco de una subcomisión que investiga su salud e idoneidad para ejercer el cargo.
«No estoy en condiciones de avalar las versiones que ponen en tela de juicio la aptitud psicofísica del doctor Carlos Fayt para continuar desempeñándose como miembro de este Tribunal», se limitó a decir la jueza.
A la vez, Highton de Nolasco consideró «beneficiosa la heterogeneidad» en la composición de la Corte Suprema, ya que actualmente es la única mujer que quedó en el órgano judicial.
Por otra parte, manifestó que el nuevo Código Procesal Penal «en términos generales, implica un avance positivo por cuanto instituye un sistema netamente acusatorio, con una estricta división de las funciones, delegando en el fiscal toda la actividad investigativa pero sin afectar las facultades que son propias del juez».
Finalmente, la magistrada señaló que «se hace necesaria una reforma integral del Código Penal», ya que aseveró que hay que «realizar una coordinación de su normativa, habida cuenta de las numerosas reformas parciales que hubo desde su sanción original».
«A la vez, se hace necesario para incorporar los nuevos paradigmas producto del Derecho Universal de los Derechos Humanos», concluyó.