Tras ser perseguido por la policía de Río Grande, un sujeto que manejaba su rodado en estado de ebriedad y que había circulado en contramano en una calle y colisionado un patrullero, pudo ser detenido. El ministerio público fiscal le otorgó la libertad. (Foto: Imagen del patrullero dañado)
RÍO GRANDE.– Anoche el personal policial logró detener al conductor de un vehículo que se había fugado por varias cuadras; con su rodado circuló en contramano por una calle y luego colisionó un patrullero; cuando fue interceptado, el conductor descendió y en forma inmediata resultó aprehendido por el delito de atentado y resistencia a la autoridad; además estaba alcoholizado. Finalmente el Ministerio Publico Fiscal le dio la libertad.
En principio el personal policial en prevención fue alertado de un rodado que estaba circulando en contramano por la circunvalación de Pacheco y Ricardo Rojas, continuando su marcha por la Av. Perón.
En la intersección de las calles Almafuerte y Fagnano, los policías interceptaron al rodado, un Renault modelo 19, colocándose el móvil policial delante de este; al intentar dialogar con el único ocupante (el conductor), que se encontraba sumamente alterado y a los gritos, se dio a la fuga por calle Almafuerte, colisionando el móvil policial.
Personal de Comisaria Segunda colaboró con la localización del rodado, quienes le realizaron señas de luces e indicaciones para que detenga su marcha; finalmente detuvo su marcha en la dársena ubicada en Kerisken al 2500.
Al descender el conductor fue aprehendido por la policía y se trataba de Santiago Verón (58); intervino el Ministerio Publico Fiscal y declaró al hecho flagrante por el delito de atentado y resistencia a la autoridad; dispuso los trámites de rigor y posteriormente le dio la libertad. El alcohotest arrojó resultado positivo: 1.72 g/L.