Inclusión: “Hay muchos niños que tienen la esperanza de compartir la educación formal”

La legisladora Myriam Martínez lamentó las voces en contra sobre el proyecto que apunta a garantizar la inclusión de chicos con discapacidad en las instituciones de educación formal de la provincia. “Este proyecto se va a trabajar y modificar si es necesario para que el próximo año los padres no tengan ningún problema de inscribir a sus hijos en la educación formal si lo quieren y las escuelas especiales van a seguir funcionando”, expresó.

RÍO GRANDE.- “Un grupo de padres que ha formado la asociación “Se puede” vinieron a contarme la necesidad que tenían de que podamos sancionar una ley que garantice la inclusión de los niños con necesidades educativas especiales en las escuelas públicas y privadas”, explicó Martínez.

En este orden recordó que “tenemos la ley nacional que es la 26.206 y tenemos una ley provincial que es la 1018 además de la Ley 48, y la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad. Todas esas son muchas de ellas normas programáticas, fijan los lineamientos, pero hay veces que se requiere de otra norma, u otra ley para que sean operativas y se cumpla efectivamente”.

La parlamentaria remarcó que “creemos que esta ley nos puede dar esa posibilidad de que sea operativo el cumplimiento de la norma, porque en el día a día de los papás, ellos encuentran que van a los establecimientos educativos, y cuando le hacen la entrevista al niño se encuentran con que no hay vacantes, que no tienen matrícula. No le dicen que no porque el chico tiene algún tipo de discapacidad”.

Y detalló que “lo que me piden los papás y con mi equipo nos pusimos a trabajar, es garantizarle el derecho a todos los niños con discapacidad que quieran formar parte de la educación formal lo puedan hacer sin ningún tipo de inconvenientes. Si los papás consideran que sus hijos pueden formar parte de la educación formal, lo pueden hacer, y no tenerlos con idas y vueltas”.

“Si los padres llegan a mí con esta inquietud significa que hay algo que no anda bien; yo hablé con el ministro de Educación y le expliqué que la idea con esta ley es realmente dar un cambio y darle una solución a los papás”, añadió.

Sin embargo lamentó que “hace unos días estuve escuchando muchas voces en contra de papás de chicos con discapacidad que son de Ushuaia, y yo lamento que ellos tengan esa mirada tan cerrada. Cuando asumí como legisladora en mi primer mandato defendí la adhesión a la Ley 24.001, y la trabajé cuatro meses en los cuales no vi a un montón de papás de organizaciones que fueran y se sentaran en la comisión acompañando esta solicitud”.

“Increíblemente hay muchos papás que se niegan a esta nueva ley, yo sé perfectamente cuál es la legislación vigente, pero no alcanza, y yo también sé que en la lucha por la igualdad y la no discriminación de los niños con discapacidad nada es poco y nada es mucho. Todo lo que nosotros podamos hacer lo tenemos que hacer y yo como legisladora lo voy a hacer. Por eso presentamos este proyecto, se va a debatir en comisión y se va a corregir todo”, sostuvo.

Martínez manifestó que “plasmamos una palabra que fue integración y no inclusión, todo eso se corrige en el trabajo de comisión, pero si nos paramos en la postura de la crítica constante, no vamos a llegar a ningún lado. Esta norma lo que va a hacer es darle tranquilidad a los papás”.

Finalmente dijo que “si nosotros con esta norma les vamos a brindar tranquilidad y evitar que peregrinen por los establecimientos educacionales donde les dicen que no hay vacantes, el objetivo estará cumplido”.

“No tengo idea de dónde están parados los detractores y repudio totalmente la actitud de estas personas que ni siquiera quieren escuchar”, cerró.