El anuncio provocó el reclamo de Argentina a Gran Bretaña para la reanudación de los vuelos con escalas en Río Gallegos que son los únicos autorizados por los acuerdos firmados en 1989 y 1999 y que tras la pandemia, no se restablecen por las restricciones impuestas por los propios kelpers.
RIO GRANDE.- El gobierno británico en Malvinas dio a conocer a través de la agencia Mercopress, “que tiene la intención de fletar un vuelo a Chile desde las Islas Malvinas” para “el sábado 19 de marzo de 2022, con regreso el sábado 9 de abril de 2022” con el único objetivo de que los chilenos visiten a familiares, puedan renovar documentación y atiendan problemas personales o de salud.
El vuelo, tendría escalas en Punta Arenas y en Santiago y no estaría habilitado para llevar cargas, ni pasajeros que viajen de vacaciones o por negocios, por tratarse de un “vuelo humanitario”.
Ante este anuncio, el Gobierno argentino reclamó a Gran Bretaña que se avance en la reanudación de los vuelos regulares entre el continente y las islas Malvinas, desde la ciudad chilena de Punta Arenas, con escala en Río Gallegos, que fueron suspendidos hace dos años por la pandemia.
Lo hizo a través de una nota oficial enviada el viernes pasado por el canciller Santiago Cafiero al gobierno del Reino Unido, que en marzo de 2020 interrumpió unilateralmente los vuelos a raíz del covid-19.
Hasta esa fecha los aviones que partían de Punta Arenas hacían dos escalas mensuales en Río Gallegos, lo que favorecía la comunicación con el archipiélago, especialmente para permitir que los familiares de los caídos en la guerra de 1982 pudieran visitar las tumbas de los soldados argentinos en el cementerio de Darwin.
En su reclamo, la Cancillería argumentó que la reanudación de los vuelos contribuiría a atender también “las necesidades de los habitantes de las Islas”.
El reclamo argentino se fundamenta en que el restablecimiento del vuelo regular desde Punta Arenas a Malvinas, con dos escalas mensuales en Río Gallegos, se “encuentra enmarcado en la Declaración Conjunta de Madrid del 19 de octubre de 1989, así como en la Declaración Conjunta y el canje de notas del 14 de julio de 1999″. “Se trata de un tema de exclusivo tratamiento de la Argentina y el Reino Unido y en los instrumentos vigentes no hay prevista ninguna otra alternativa para el tratamiento de esta temática”, insistió la Cancillería.