Primero, se bajó la campana porque representaba un peligro. De allí en adelante el deterioro continúa y los reclamos de la Escuela 2 aún no tienen respuesta.
RIO GRANDE.- Las maderas rotas y despintadas y una imagen de abandono ocupan hoy el lugar de la campana de la Escuela Nº 2, “Dr. Benjamín Zorrilla”. Lo que una vez fue un símbolo para celebrar la paz y la amistad, representa ahora una amenaza para los niños y docentes que concurren allí a diario.
El campanario se instaló en la escuela como parte de la celebración del Día de la Paz, durante la gestión de Jorge Colazo. Hace un tiempo ya, los mismos padres decidieron bajarla ante el peligro de que se cayera: “Primero pedimos que retiren la campana porque se podía caer y un fin de semana apareció adentro de la escuela porque los papás se reunieron para quitarla y la entraron por el peligro que representaba por el peso que tiene”, explicó Marisa Brondo, docente de la institución. Además, asegura que los directivos reclamaron en varias oportunidades al Ministerio de Educación y al área Infraestructura Escolar, hoy Secretaría de Planeamiento, que reponga por lo menos las maderas faltantes en el campanario, porque es un lugar que los niños transitan mucho durante los recreos.
“Si se llega a caer un nene o meter un pie y se golpea nosotros somos responsables por ellos, es una situación totalmente insegura”, insistió Brondo
Sin respuesta al reclamo, la campana mientras tanto, permanece dentro del edificio, y el campanario se va deteriorando cada vez más ante la vista de todos.