La librería ganadora recibirá $350.000 para comprar libros en la FED y un 50% de descuento en los stands adheridos. El objetivo es reconocer el trabajo de las librerías de todo el territorio argentino.
USHUAIA.- La Feria de Editores (FED) abrió la convocatoria para la segunda edición del Premio a la labor librera, en la que pueden participar todas las librerías del país, hasta el 16 de junio, inclusive. La ganadora obtendrá 350.000 pesos para comprar libros y un 50% de descuento en los stands adheridos que participen en la FED 2022, que se realizará el 5, 6 y 7 de agosto. Allí se anuncia a la librería ganadora.
Toda la información se encuentra en: https://feriadeeditores.com.ar/premio-a-la-labor-librera/
El objetivo es reconocer el trabajo de estos espacios, que excede ampliamente la venta de libros. Comprende, además, la difusión del pensamiento y la literatura, la permanente relación con la comunidad que la rodea, y la generación de un intercambio cultural dentro y fuera de su espacio físico.
El jurado tendrá en cuenta la capacidad que tuvo la librería durante 2021 para generar actividades y llevarlas adelante en relación con su tamaño físico. También tomará en consideración la variedad y la originalidad de su propuesta, y el que cumple para la comunidad. Se evaluarán los métodos utilizados para difundir las novedades y los fondos editoriales, el vínculo con los proveedores y cómo puede impactar el premio en el desarrollo de la librería.
Los participantes del jurado, compuesto por cupos vinculados a la realización del libro, son: Mariano Blatt (editor y poeta), Soledad Urquía (escritora y editora), Natalia Gelós (escritora y periodista), Federico Gori (promotor cultural), Santiago Subiela (librero y escritor) y Enrique Avogadro (Ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires).
Esta iniciativa cuenta con el apoyo del Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, a través de Impulso Cultural y Mecenazgo.
Las librerías son un eslabón indispensable en la cadena productiva del libro: sus ventas tienen impacto directo en la labor de las distribuidoras (que dan trabajo a administrativos, fleteros, contadores, promotores, diseñadores, community managers, etc.), que impactan, a su vez, en las editoriales (que dan trabajo a diseñadoras, correctoras, traductoras, maquetadoras, editoras, community managers e ilustradoras), que pagan regalías a las y los autores.
Asimismo, se interesan de forma incansable en la difusión del libro y generan un espacio de intercambio cultural dentro y fuera de su espacio físico: son un foco de dinamización de la cultura local y una conexión con el pensamiento internacional.