La liberación de un detenido desató un caos en los asentamientos con amenazas y casas incendiadas

Las consecuencias de un fallo de la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones resultaron inimaginables cuando el viernes por la noche fue liberado Jhonatan Parra, dominicano detenido por un hecho de sangre, el cual tenía normas de conducta y prohibición de acercamiento a sus víctimas y testigos. En pocas horas violó todas esas imposiciones judiciales y se desató el caos, hasta que finalmente fue detenido nuevamente.


RIO GRANDE.- Los jueces de la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones (Walter Tabarez Guerrero, José Jofre y Julián de Martino) resolvieron en la noche del viernes la excarcelación de Jhonatan José Parra, dominicano de 28 años detenido por “tentativa de homicidio” en relación a apuñalar a tres sujetos en plena vía pública el 15 de mayo pasado, en pleno centro de la ciudad.

La libertad fue concedida a Parra bajo la prohibición de acercarse a los domicilios de Pablo Natalio Soria, Axel Emanuel Toranzo y Manuel Armando Flores, víctimas de aquel hecho, y del domicilio particular de un testigo.

Además Parra contaba con la prohibición de salir de noche, consumir bebidas alcohólicas y portar armas de cualquier tipo.

Pasadas pocas horas de su liberación bajo estas normas, Parra increíblemente hizo todo lo contrario, infringiendo absolutamente cada una de las normas impuestas.

En horas de la noche, intoxicado –incluso al momento de su detención se le encontró una bocha de cocaína-, fue una a una a la casa de sus víctimas y a la de un testigo, a amenazar a sus familias.

El fallo había liberado esta situación a la Policía, disponiendo el facilismo de la “custodia policial al domicilio de las víctimas, testigos y todos sus familiares”, cuestión que resulta en lo operativo prácticamente imposible, de hecho tras lo sucedido, las custodias se implementan mediante un recorrido preventivo permanente.
Caos desatado

Las víctimas del hecho de Parra son sujetos también vinculados al ámbito policial, por lo que al conocer de las amenazas sufridas por sus familias, comenzaron a producirse distintos inconvenientes

El descontento partió desde los domicilios de estas personas en calles Monte Independencia, Falconier, Puerto San Luis y Los Sauces, desde donde se comenzaron a producir incidentes que finalmente derivaron en atentados incendiarios contra viviendas de familias dominicanas, vinculadas a Parra.

El primero de los siniestros tuvo lugar en una vivienda de calle Rafaela Ishton al 1500 (foto), donde no había nadie ya que se presume era la vivienda que residía Parra antes de quedar detenido, la cual fue consumida completamente por las llamas. El perito de bomberos luego confirmaría la intencionalidad del hecho.

El segundo episodio tuvo lugar en Falconier al 700, donde un vecino presenció cómo prendieron fuego un grupo de personas que entraron a la vivienda y luego salieron corriendo, asistiendo el propio vecino con un balde de agua que ayudó a minimizar los daños en esta propiedad, perteneciente a una pareja dominicana, que no estaba presente al momento del hecho.
Detención y calma

Al personal de la comisaría Cuarta debió sumarse el grupo táctico de la División Servicios Especiales, quienes se apostaron en la zona para tratar de dispersar a los revoltosos, mientras finalmente fue localizado Parra en el domicilio de su progenitora.

Allí finalmente Jhonatan José Parra quedó detenido cerca de las 2 de la madrugada por el delito de incumplimiento de las normas de conducta y medidas judiciales, estando esta vez a disposición del juzgado de turno, a cargo, interinamente, del doctor Andrés Leonelli.

“De milagro no hubo muertos que lamentar”, confiaron las autoridades policiales.
“De milagro no hubo muertos que lamentar”, confiaron las autoridades policiales.