USHUAIA.- Adriana Urciolo, vicerrectora de la Universidad de Tierra del Fuego, participó de la audiencia pública que se realizó el martes, en el Concejo Deliberante, donde se evaluó el proyecto del Ejecutivo Municipal sobre la desafectación de tierras para la propuesta urbano-ambiental y emitió una opinión favorable a la propuesta.
Desde la Universidad “tenemos la tranquilidad de que se relevaron todas las zonas, se tuvieron en cuenta todos los componentes que van a ser conservados, solo se va a afectar aquello que ya está impactado. La lógica es justamente la de conservar. En el caso de las turberas se plantea una intervención para la conservación. Y se plantean estrategias para el uso turístico o recreativo de los espacios por parte de la comunidad. No solo se ha pensado en no intervenirlo sino que, si se interviene, se hace desde lo positivo”, dijo Urciolo.
La Universidad destacó la voluntad que tuvo la Secretaría de Hábitat y Ordenamiento Territorial de escuchar las distintas voces antes de llevar el proyecto al Concejo Deliberante. “El proyecto fue muy discutido previo a ser tratado en el concejo y quiero destacar la voluntad de escuchar distintas voces antes de llevar el proyecto al concejo”, expresó en FM del Sur.
“Cuando escuchamos por primera vez el proyecto, que la secretaria Teresa Fernández lo expuso en la universidad, vimos que muchos de nuestros prejuicios no tenían tanto sustento por todo el trabajo técnico que había detrás de este proyecto”, aseguró.
“Al principio, antes de conocer al proyecto, simplemente por lo que se comentaba, teníamos nuestras preocupaciones, respecto sobre todo a la cuestión ambiental. En mi caso, desde hace muchos años estoy comprometida con la conservación del ambiente y era una de nuestras preocupaciones”, indicó Urciolo.
La directiva de la UNTDF señaló que en la audiencia pública destacó “el trabajo técnico sobre el terreno. Muchas veces se hacen los mapas y no se tiene en cuenta lo que está abajo: el bosque, las turberas. La gran sorpresa con este trabajo es un trabajo hecho sobre la base ambiental, es decir de relevamiento del terreno, con el firme propósito de conservar todos los componentes que jueguen un rol importante en nuestras cuencas y laderas, el bosque, las turberas”.
Urciolo resaltó dos aspectos como muy positivos. El primero de ellos fue “el trabajo técnico político que se realizó en tratar de conservar y que la afectación sea la menor posible en el ambiente”. En cuanto al otro aspecto, se refirió al concepto de “integrar en lugar de segregar la ciudad”. Urciolo explicó que se trata “de integrar pensando en la ciudad como una sola y no en barrios altos, barrios bajos, Andorra. Se trata de un proyecto integral y es otra gran sorpresa para quienes desde hace muchos años venimos trabajando en estos temas y estamos acostumbrados al mapa frío, sin tener en cuenta estas cuestiones tan de base”.
La autoridad universitaria celebró que se hicieran las cosas al revés de cómo se vinieron haciendo desde hace años, “partiendo desde abajo, de lo que hay en el ambiente para luego hacer la planificación”.
Puso nuevamente a disposición de la Municipalidad a la Universidad para colaborar técnicamente en lo que necesiten para una etapa posterior que se vincule a los servicios en la zona a urbanizar. “Planteamos como una preocupación a futuro el tema servicios. Entendemos que esto es primero una estrategia de intervención y que la forma de resolver la cuestión de servicios a los nuevos lugares que se habiliten será una cuestión posterior. En este sentido ofrecemos nuevamente a la universidad con la colaboración técnica que necesiten en ese sentido”, dijo.