El ministro del Interior, Wado de Pedro, señaló que “culminamos una muy buena jornada electoral que se desarrolló con normalidad y una participación superior al 70%”.
BUENOS AIRES.- La concurrencia a las urnas en las elecciones legislativas alcanzó ayer al 71 por ciento del padrón nacional y tocó así uno de los niveles más bajos de la última década, a pesar de haber superado por varios puntos a la registrada en las primarias (PASO) de septiembre pasado.
Una vez cerrada la votación, poco después de las 18:00, la Cámara Nacional Electoral informó que el 71% de los 34 millones de ciudadanos habilitados se acercó a las escuelas para sufragar, mientras que el ministro del Interior, Eduardo de Pedro, confirmó que la participación «fue del 71 o 72%».
El titular de Interior realizó estas declaraciones en el marco de la conferencia de prensa realizada desde la sede de Correo Argentino en Barracas, pocos minutos después de finalizada la jornada electoral, donde detalló que “fue una muy buena jornada”, e informó que “las lluvias y tormentas sólo generaron algunos pequeños inconvenientes en la provincia del Chaco, donde se generaron inundaciones, y en algunos sectores de Entre Ríos”.
“Quiero agradecer a todos los argentinos y argentinas que fueron a votar. Hubo mayor participación, y además funcionó el nuevo protocolo sanitario, que permitió que se pudiera votar de manera más fácil, ágil y rápida”, indicó de Pedro, acompañado de la secretaria de Asuntos Políticos del Ministerio del Interior, Patricia García Blanco; y la titular de la Dirección Nacional Electoral (DINE), Diana Quiodo.
Algunos antecedentes
Si bien el número preciso de votantes puede variar por centésimas, ese nivel de adhesión a los comicios supera el 67% que se registró en las PASO, una participación inusualmente baja que preocupó tanto al oficialismo como a la oposición y los llevó a remarcar el pedido a la ciudadanía para que «vaya a votar».
A pesar de la diferencia positiva que se dio entre las PASO y las generales, de 4 o 5 puntos porcentuales, una participación electoral apenas por encima del 70% sigue siendo baja en comparación con los antecedentes de los últimos, en los que estuvo siempre más cerca del 80% del padrón nacional.
El caso más cercano es el de 2013, cuando votó un 75% de las personas habilitadas en las PASO y 76% en las legislativas generales, con una variación del 1% entre una y otra, pero en adelante la participación siempre fue mayor.
En los comicios presidenciales de 2015 votó el 74,9% del padrón en las PASO y la concurrencia escaló hasta el 81,1% en las generales, mientras que en las legislativas de 2017 fue del 74% en las primarias y 77,6% en las generales.
Por último, en las elecciones de 2019, donde Mauricio Macri buscó su reelección ante Alberto Fernández, la asistencia a las urnas fue del 76,4% en las PASO y del 80,8% en las generales, con poco más de cuatro puntos de diferencia entre una y otra.
Durante la campaña, tanto los candidatos del Frente de Todos como los de Juntos por el Cambio insistieron en pedirle a la ciudadanía que participe del proceso electoral, en la búsqueda no solo de ampliar su propio caudal de votos sino también de contar con un panorama más completo sobre las preferencias y el humor de la sociedad.