Ocurrirá en los próximos días cuando Tierra del Fuego firme el convenio ante el Consejo Nacional de las Mujeres. Esperan que la nueva medida permita visibilizar más casos, generando el aumento de la cantidad de denuncias.
BUENOS AIRES.- La secretaria de Derechos Humanos de la provincia, Nélida Belous, participó de una jornada de trabajo vinculada al Registro Único de Casos de Violencia contra la Mujer, donde anunció que en los próximos días la provincia firmará el convenio de adhesión al mismo.
Respecto a la importancia de contar con un Registro Único en la provincia, la titular de la cartera de Derechos Humanos afirmó que permitirá visibilizar más casos, generando el aumento de la cantidad de denuncias; “las mujeres empiezan a sentir confianza de acudir a las distintas instituciones del Estado, y encontrar la respuesta que están buscando y la protección que necesitan. Es una herramienta muy importante para prevenir los femicidios”.
Belous manifestó la necesidad de trabajar con los jóvenes, “nos falta concretar una importante tarea de prevención con las nuevas generaciones, que se pueden acostumbrar a conductas de vida que a largo plazo pueden terminar siendo nocivas”, concluyó.
La funcionaria contó, además, que durante las jornadas a las que la provincia fue invitada por el INDEC, se dio a conocer el software que lleva adelante el registro único de los casos de violencia contra la mujer.
Números de la violencia
Al menos 55 mujeres de más de 14 años denuncian cada día ser víctimas de violencia de género ante dependencias nacionales de todo el país, según los primeros datos oficiales sobre este flagelo presentados en el Consejo Nacional de las Mujeres.
Así, entre enero de 2013 y julio de 2015, fueron 50.703 las mujeres (y mujeres trans) registradas como víctimas de agresión machista por dependencias estatales de la órbita nacional a los que ellas mismas acudieron para realizar la denuncia del hecho o para solicitar algún tipo de asistencia.
«Estamos cumpliendo con una deuda que tiene el Estado y en la que venimos trabajando desde hace dos años y medio», dijo Mariana Gras, presidenta del Consejo Nacional de Mujeres.
«Pero esta es la punta del iceberg, porque obviamente son solamente las mujeres que acudieron para explicitar una situación, pero sirve para concientizar y también saber qué pasa con la respuesta del Estado», acotó la directora nacional de Planificación y Coordinación Estadística del Indec, Ana Feldman.
Los datos surgen del Rucvm, una base de datos que tiene como aportantes a dependencias estatales de los tres poderes y de las tres jurisdicciones (nacional, provincial y local) de todo el país -aunque ahora se presentan sólo datos de organismos nacionales- y cuyo objetivo es «centralizar y sistematizar la información disponible» para ser utilizada para «como insumo para el diseño de políticas públicas».
Uno de los datos más relevantes de este informe es la vulnerabilidad económica de las víctimas, que en un 51 por ciento de los casos depende de otros porque no tiene un ingreso laboral propio -mientras que el 77 por ciento de los agresores sí lo tienen-, lo que en parte explica por qué el 56,8 por ciento de ellas convive con el victimario, que en el 83,9 por ciento de los casos es la pareja, novio o expareja.
«Esto habla de una altísima vulnerabilidad de las mujeres en situación de violencia, que cuando regresa a su hogar encuentra al agresor», de quien depende materialmente, aseguró Feldman.
«Nosotros creemos que firmemente lo que te permite salir de la violencia es la independencia económica. Pero pensar que con la pura erogación de capital se puede resolver un problema de violencia, es minimizar el problema, porque también hay que reconstruir la autoestima y esto tiene que ver con la inclusión no solo en el marco de la economía sino en el marco de una construcción colectiva y una inserción social», aseguró Gras.
