Con un total de ocho episodios, la anteúltima entrega de la exitosa serie es la peor puntuada por los fans que nunca estuvieron muy de acuerdo con el recorte indiscriminado de la temporada, que no llegó a cerrar ninguna historia. La responsable: Sarah Jessica Parker, y aquí te contamos el por qué.
Que una serie sea un éxito no la exime de tener alguna que otra temporada o episodio olvidable, como le sucedió a Sex and the City con su quinta entrega, estrenada en 2002, considerada por los fans como la peor de todas las temporadas.
Con un total de 8 episodios la quinta temporada fue la más corta de todas debido al incipiente embarazo de Sarah Jessica Parker. Si bien la entrega estaba pensada con 18 episodios, como era lo normal en la serie, los guionistas tuvieron que resumir la historia cuando notaron que sería inviable esconder por mucho más tiempo el vientre de la actriz que lució, durante toda la temporada, ropa bastante más holgada de la que supo usar Carrie en un principio.
A diferencia de otras series, donde los embarazos de las actrices son utilizados en favor de la historia, en este caso, era inviable que la protagonista estuviese embarazada ya que su historia nunca hubiese dado el pie para ello. Curiosamente, la trama principal de Miranda giraba alrededor de su nueva maternidad, algo que fue la propia actriz la que lo sugirió al momento de quedar embarazada y que dicho proceso fuese llevado, en paralelo, a la ficción.
Lo criticable de esta entrega es que, en el afán de resumir, los guionistas dejaron bastantes cabos sueltos que terminaron con un final abrupto y sin cierre para la mayoría de las historias que se narraban en la temporada. Por esta razón, fue que la sexta y última temporada tuvo un total de 20 episodios, lo que dio más aire para continuar y cerrar debidamente la historia, evitando la ira de los fans que en una era pre redes sociales no fue tan violenta como lo hubiese sido hoy en día con la proliferación de apps como TikTok y X.