Las CTA se declararon en «sesión permanente»

Fotografía: www..lmneuquen.com.

BUENOS AIRES (NA).- La CTA de los trabajadores y la CTA autónoma se declararon en «estado de sesión permanente» en rechazo a la reforma laboral que impulsa el Gobierno y adelantaron que se movilizarán al Congreso cuando la iniciativa sea debatida en el recinto.

Así lo anunciaron los jefes de ambas centrales, Hugo Yasky y Pablo Micheli tras un plenario de las dos CTA de la que participaron autoridades de la CGT de Francia y la CUT de Brasil, las cuales fueron invitadas para exponer sobre la reformas laborales que se implementaron en esos países. «El proyecto de la reforma laboral ha sido redactado por los grupos empresarios, muy pocos puntos los redactó el Gobierno» denunció Yasky, quien alertó además que se trata de «una ofensiva que pretende arrasar con las conquistas de los trabajadores».

Por su parte, Micheli consideró que «es asombrosa la similitud» de la iniciativa del Gobierno de Mauricio Macri con las reformas laborales de Francia y Brasil, y planteó que de esa forma «ha ido más allá que la dictadura militar en materia laboral».

En rigor, las CTA aclararon que rechazan tanto la reforma laboral, con la reforma impositiva y la reforma previsional que alienta la Casa Rosada luego de su clara victoria en las elecciones legislativas del 22 de octubre: «Son tres proyectos en uno, no se pueden separar porque los tres apuntan al deterioro del sistema laboral», opinó Micheli.

También repudiaron que las dos CTA hayan sido marginadas de la mesa de negociación de la reforma laboral (participa sólo la CGT por el sindicalismo) bajo el criterio de mayor representatividad de la central que conduce el triunvirato, sobre lo que Yasky consideró que «es una violación de la libertad sindical estipulada por la OIT».

Los dirigentes de la CTA apuntaron especialmente contra los cambios que promueven «contrataciones por tiempo indeterminado, que generan preocupación en los trabajadores; «la eliminación del aguinaldo y otros ítems para calcular las indemnizaciones»; y «la destrucción de la representación colectiva en las discusiones con las patronales».