USHUAIA.- La gobernadora Fabiana Ríos, dijo estar “conforme” con el acuerdo alcanzado con el gremio docente, dado que de esta manera se produce el reinicio de clases para los niños, adolescentes y adultos en toda la Provincia.
“Independientemente de la enorme preocupación que genera la posibilidad de lograr un acuerdo salarial en buenas condiciones para los trabajadores, como también que sean económicas y se puedan cumplir; fueron grandes preocupaciones”, afirmó.
En ese contexto, explicó que “había un porcentaje de masa salarial a distribuir y que esa distribución debería hacer acercándose lo más posible a los sindicatos, ya que en todos ellos los porcentajes de masa salarial fueron distribuidos y aceptados”.
Sin embargo, recordó que las negociaciones salariales con el sindicato docente “siempre fueron extensas” y especialmente en esta última circunstancia que se vio agravada por el hecho de público conocimiento por la agresión sufrida por un paritario.
“Lo único que queríamos era discutir el dinero disponible de manera que al sindicato le resultara más útil y satisfactorio al colectivo docente”, manifestó la gobernadora Fabiana Ríos.
Haciendo hincapié en el ofrecimiento de la mesa técnica -ámbito en el que se cerró el acuerdo-, dijo que “no había sido posible para ir destrabando y esto se discutió lunes y martes, pero se demoró porque hay modos de comunicarse que interfieren con otras prácticas”.
La gobernadora Ríos también rememoró los últimos 27 años en que reside en la Provincia, pero también en los que lleva en la Administración Pública, y sostuvo: “recuerdo en Ministerio de Trabajo, paritarios de Gobierno sacados por ambulancia y otros encerrados”.
“Las discusiones salariales en nuestra Provincia tienen niveles de conflictividad muy altos”, aseveró la mandataria, y consideró que “hay que aprender a relacionarnos de otro modo”.
En uno de los últimas reuniones entre los paritarios del SUTEF y del Ejecutivo provincial, un dirigente del gremio docente propinó una patada a una carpeta que llevaba consigo un paritario de Gobierno, situación que derivó que desde el Ejecutivo pidieran que se cambiaran los paritarios para poder continuar con las negociaciones.
“Las condiciones que yo puse para conversar eran estas, porque se habla, no se pega, porque cuando nos faltan las palabras llegamos a la violencia”, observó la Gobernadora.
Para Ríos, “es un tema bien complejo; es razonable que un dirigente sindical lleve adelante una pelea por su sector y que quien tiene responsabilidad del Estado tenga que mirar las variables de comparación con otros sindicatos”.