RIO GRANDE.- El ingenio argentino no tiene límites. Y aún más, si se trata de maximizar recursos en tiempos de campañas proselitistas. En la recta final para las elecciones del 21 de junio, los distintos partidos políticos elaboran sus propias estrategias con el objetivo de captar la mayor cantidad de votos que les permita el acceso al espacio electoral buscado.
En la ciudad se pudo observar en los últimos días novedosas formas de hacer campaña. Tanto el Partido Social Patagónico como la fórmula Unir TDF pasea por las calles riograndenses enormes micros repletos de imágenes de sus candidatos.
También el centenario partido de la Unión Cívica Radical preparó un micro pero con doble función: por un lado expone el nombre y las fotos de su primer y segundo candidato a concejal: Paulino Rossi y Diana Flores; y por otro lado ofrece información sobre padrones electorales.
Pero quizás lo más llamativo lo constituye la modalidad que adquirió la campaña del partido Pensando en Grande que solo lleva candidato a concejal. Héctor Garay y su equipo de trabajo eligieron reflejar imágenes de los tres candidatos y también las acciones que realizaron durante su actual gestión en puntuales y visibles paredes de la ciudad. Lo hacen a través de cañones reflectores que ubican de tal manera que la proyección sea lo más visible posible.
El último fin de semana las proyecciones se mostraron sobre uno de los lados de la torre de Obras Sanitarias, ubicada frente a la plaza Almirante Guillermo Brown. Sitio elegido por muchos, al momento de elegir alguna salida nocturna los fines de semana.
Desde ese mismo partido, ubican, en puntos donde la circulación vehicular es intensa, una camioneta que transporta en su parte trasera, cartelería luminosa que insta a los vecinos a votar la lista 168.
Año a año, los grandes carteles exhibiendo la foto de los candidatos ubicados en domicilios particulares adquirieron mayor presencia. Hecho que hace que la ciudad se vea repleta de colores y fotos, tomando particularidades únicas.
Los banners que se colocan en los vehículos en sus parabrisas y lunetas también viene en incremento en número y tamaño, y muchas veces son confundidos con autos que prestan el servicio de transporte público.
En tanto que permanecen las modalidades de las multitudinarias caminatas, casa por casa, en los distintos barrios riograndenses, sin olvidar los carteles que identifican cada sector, y las pecheras que exhiben los nombres de los candidatos.
Tampoco nos abandonan, los carteles que, a pesar de las prohibiciones, permanecen estoicos en las columnas del alumbrado público; que se espera sean retirados una vez que culminen las elecciones de autoridades provinciales.