«La suba de tarifas no solo era necesaria para generar un esquema de precios relativos que reflejara más fielmente la estructura de costos de nuestra economía: además, era central para achicar el importante déficit fiscal primario».
BUENOS AIRES (NA).- Mientras que la inflación acumulará alrededor de 250% entre 2016 y 2019, las tarifas subirían cerca de 550% y el dólar escalaría más de 400%, lo cual provoca una «fuerte pérdida de poder adquisitivo», según un informe difundido por la consultora Ecolatina.
Así, el costo de los servicios públicos y la cotización de la divisa estadounidense más que duplicó en el primer caso, y subió 60% en el segundo, con relación a los precios de la economía.
Además, los salarios nominales crecerían en torno a 200%, «muy por debajo de la inflación», consignó el reporte.
Estimó, además, que el alza de precios se desacelerará del 40% en 2019 al 30% en 2020, producto de que «no es posible bajar sensiblemente la inflación a la vez que se corrigen los precios relativos, y que no será posible incrementar el gasto en subsidios».
El costo de vida pasaría «de la zona del 40% en 2019 a un piso de 30% en 2020 (por caso, el FMI elevó su proyección de inflación para el próximo año de 21,2% a 32,1% en su última revisión)».
«Producto de estas dinámicas, durante la gestión Cambiemos habrá tenido lugar un reacomodamiento de precios relativos», indicó Ecolatina.
Señaló que «aunque prácticamente se habrán corregido los atrasos tarifarios y cambiarios heredados, el poder adquisitivo habrá retrocedido significativamente en el período».
El trabajo recuerda que «uno de los principales problemas económicos que heredó Cambiemos fue la distorsión de precios relativos, entre los que sobresalían el atraso tarifario y cambiario».
Entre 2007 y 2015 la inflación acumulada más que duplicó a la suba del tipo de cambio y de las tarifas.
«El gobierno de Mauricio Macri intentó encarar un proceso de corrección de precios relativos en simultáneo con una reducción de la inflación general. Lamentablemente, este segundo objetivo estuvo lejos de alcanzarse: la corrección de precios relativos aceleró la inflación», indicó el informe.
Pero aclaró que «la mayor inflación no anuló la corrección de precios relativos: el alza de las tarifas de Servicios Públicos superó ampliamente al del IPC GBA Ecolatina entre 2016 y 2018 (370% y 160%, respectivamente).
Por este motivo se explica que, pese a su impacto negativo en términos de «humor social», los precios regulados continuaron en ascenso durante la primera parte de este año.
Como resultado, los subsidios económicos mostraron un retroceso de 14,5% interanual en términos reales a lo largo del primer semestre de 2019.
Los precios regulados crecieron 2 puntos porcentuales por encima de la inflación general entre enero y junio de este año (24,5% y 22,5%, respectivamente).
A contramano, en la segunda parte del año, mientras que la inflación general acumularía alrededor de 15%, los servicios públicos crecerían menos de 5%.
«Dada la ajustada meta fiscal de superávit primario de 2020, la suba de tarifas seguirá el año próximo y ralentizará la baja de la inflación», estimó Ecolatina.
La entidad recordó que «la suba de tarifas de la segunda parte de 2019 se pateó a 2020» y consideró que «el reciente congelamiento tarifario residencial puede percibirse como un estímulo no salarial al consumo».