La Marihuana es una planta con una historia muy extensa y controvertida. Su progresivo paso a la legalidad en todo el mundo la sitúa en el centro de la escena, pero la realidad es que desde hace más de 5.000 años ha sido utilizada con diversas finalidades, que van desde el uso recreativo hasta su implementación en el tratamiento de varias enfermedades o el alivio de múltiples malestares.
La marihuana, bien llamada “cannabis sativa”, es una planta que tiene hojas y tiene flores. Es originaria del continente asiático y puede tener dos sexos, macho o hembra.
En su composición contiene cientos de cannabinoides. Los cannabinoides son un tipo de sustancia química que produce distintos efectos y que se encuentran mayormente en la flor de la planta hembra. Sus dos formas más conocidas son el CBD y el THC.
Inicialmente se consideró al CBD como el cannabinoide bueno y al THC como el cannabinoide malo. Esto es porque el CBD no produce efectos psicoactivos, es decir, no altera el estado de consciencia bajo ningún aspecto. De allí que los aceites terapéuticos son conocidos como Aceite de CBD.
Por otro lado, el THC es una sustancia psicoactiva. Estimula el sistema nervioso, altera la percepción, ralentiza el tiempo, etc. Sin embargo, se ha comenzado a entender que también produce efectos beneficiosos para la salud.
En los próximos posteos intentaré aproximarnos a la idea de cómo trabajan estos cannabinoides y cuales son los efectos que se pueden esperar en la salud de una persona. Su descripción, la exposición de los estudios científicos más los relatos en torno a la experiencia en el consumo, serán algunos de los distintos elementos que nos enseñarán qué tan útil puede ser el uso del cannabis en relación a la salud y el bienestar de las personas.
El comienzo de la legalización y los avances en materia legislativa en distintas partes del mundo lleva en la actualidad a muchas personas a dedicarse al autocultivo. El autocultivo es precisamente la jardinería o la práctica de cultivar plantas de marihuana, mediante distintas técnicas, para consumo propio. Para algunos es una forma de producir su propia medicina cuando de dolores y malestares se trata. En casos mas complejos, son madres que cultivan para sus niños en cuadros como epilepsia refractaria, autismo e hiperactividad, entre otros.
También existe el autocultivo para los usuarios recreativos que buscan dejar de comprar flores de manera clandestina, aunque para ellos aun no existe una figura legal que los avale. En la actualidad, en la Argentina, es posible cultivar de manera legal siempre y cuando sea con fines medicinales y se haya realizado el registro correspondiente en lo que se conoce como el REPROCANN.
Desde éste lugar también iré abordando diferentes instancias útiles e interesantes que hacen al autocultivo, realizando un recorrido analítico y expositivo de sus distintas técnicas y formas; así como la planificación y preparación de estrategias alrededor del cultivo de la planta y del intento de recrear un medio ambiente propicio para su desarrollo.
De la misma manera, buscaré describir las cuestiones culturales y conceptuales que existen en torno a la planta para que podamos desarrollar una percepción trabajada, incluso en referencia a los juicios y prejuicios que recaen sobre la misma y al papel que puede llegar a ocupar en la sociedad, desde un entendimiento más acorde a lo que ahora se sabe sobre ella.
Este proceso de deconstrucción y construcción del concepto que tenemos acerca del cannabis comienza para nosotros hoy, aquí en éste espacio otorgado por el Diario El Sureño dando por concreta la demostración de que, enhorabuena, El Cannabis ha encontrado un nuevo lugar desde donde ser mejor aprendido por todos y todas. De eso se trata esta historia.
Jorge M. Choren – El León de Judah
VENTA DE INSUMOS
Bienvenida la capacidad de debatir este tema con todas las herramientas necesarias!!!
Los tiempos van cambiando